La suspensión de Raül Romeva como senador con carácter retroactivo ha tenido consecuencias inmediatas. El grupo propio de ERC y Bildu en el Senado no ha podido constituirse al faltar un miembro para cumplir el requisito de diez senadores, al desaparecer el preso político de la ecuación. Es por eso que la Mesa de la cámara alta ha dado cinco días para presentar una nueva composición. Paradójicamente, gracias a cuatro senadores prestados por los republicanos, JxCat sí que ha constituido su grupo junto a Coalición Canaria. A pesar de todo, tiene solución.

Es un juego de números muy complejo. Con la suspensión de Romeva, ERC dispone de doce senadores y Bildu uno. En total son trece, pero como los republicanos habían cedido cuatro a JxCat para formar su grupo pasan a tener nueve. El reglamento establece que los grupos parlamentarios tienen que estar integrados por diez miembros. De esta manera, tendrán que presentar una nueva composición antes de cinco días si no quieren acabar en el Grupo Mixto.

La solución podría llegar mañana desde el Parlamento vasco, que votará la designación de los senadores autonómicos, de los cuales uno pertenece a la izquierda abertzale. Será Idurre Bideguren, exalcaldesa de Bermeo, que ocupará el lugar de Jon Iñarritu, ahora diputado en el Congreso de los Diputados.

La portavoz de ERC en el Senado, Mirella Cortés, ha denunciado la situación después de la reunión de la Mesa, y ha criticado que es consecuencia de la suspensión retroactiva. "Cualquiera que sepa un poco de derecho sabe que no se pueden suspender derechos retroactivamente", ha dicho Cortés.