La consellera de Educació, Anna Simó, ha comunicado este miércoles a la mesa sectorial y al Consell Escolar que el inicio del curso escolar será el 9 de septiembre, y que acabará el 20 de junio. De esta forma, Educació retrasa la fecha de inicio de curso, como le habían pedido varios miembros del Consell Escolar, que planteaban un margen de cinco días para prepararse, y los sindicatos educativos. El departamento siempre había puesto como condición que el primer día de curso fuese antes de la Diada. Sin embargo, el exconseller Josep González Cambray había establecido que el inicio de curso fuera siempre el cuarto día laborable.

El informe PISA

Por otra parte, ha puesto en duda que las ratios y la falta de profesionales expliquen los resultados PISA del 2022, tal como apuntaba una encuesta de CCOO. Simó ha defendido que ahora hay "más docentes que nunca" y que la bajada de ratios está en marcha. Para la consellera, la complejidad en las aulas es aquello que aporta "presión" a los docentes y ha añadido que los "estragos" de la pandemia todavía son visibles en las aulas. Además, ha reiterado que los efectos de la mejora de la segregación todavía no eran visibles en los resultados de PISA del 2022 y ha confiado que los "brotes verdes" de las pruebas de competencias del 2023 se puedan confirmar este año.

Ha defendido que la política de Educació es seguir incrementando el número de docentes u otros profesionales de la educación e ir reduciendo progresivamente las ratios. En este sentido, ha dicho que le gustaría mucho poder hacerlo en la secundaria ya, pero ha reconocido el "problema de espacios" existente. "No se puede hacer de un día por el otro", ha declarado.

El apoyo a los presupuestos

En clave de política general, ha hecho un llamamiento a los comunes a dar apoyo a las cuentas y ha asegurado que no entendería que por una cuestión como el Hard Rock, que se ha preguntado si es de preocupación social, no salgan adelante los "mejores presupuestos de Educació de la historia". Simó ha defendido que lo que dijo este miércoles el presidente Pere Aragonès es que no todo depende del Govern, sino que hay una mayoría de diputados en el Parlament a favor de este proyecto del Hard Rock. En todo caso, ha insistido en que Aragonès dijo que las cosas se harían bien.

Precisamente este jueves la CUP ha asegurado que quiere influir "de manera activa" en la elaboración de los presupuestos del 2024 y ha avisado al Govern de que "la pelota está en su tejado". A través de un vídeo difundido por las redes sociales, los diputados Xavier Pellicer y Mar Ampurdanès han criticado que las cuentas del año pasado pactadas con PSC y comunes han traído "destrucción del país, mayor dificultad para acceder a la vivienda y barra libre para macroproyectos".