El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha sido este lunes abucheado a la llegada del acto en que presentaba su nuevo libro, 'Tierra Firme'. Decenas de personas lo esperaban en las puertas del Círculo de Bellas Artes de Madrid, y a su llegada lo han insultado diciéndole, entre varias cosas, "sinvergüenza" e "hijo de puta". Dentro del acto, que ha sido conducido por el presentador de televisión Jorge Javier Vázquez, ha vuelto a reivindicar la amnistía. Esta vez, sin embargo, ha asegurado que ya se ha hablado bastante de las "necesidades" que lo llevan a aprobar esta ley: la necesidad aritmética con el independentismo en el Congreso. Y ha abogado para empezar a hablar de las "virtudes". Una de ellas, ha asegurado, es poder "extraer lecciones" del 2017.

Sánchez ha señalado, también, que no es comparable la amnistía del 1977 con la que —todo indica— se acabará aprobando a principios de 2024. Sí que ha dicho, no obstante, que una ley que repare la persecución judicial a independentistas es positiva porque hace pasos en la "superación" de un conflicto político entre Catalunya y España. Ha vuelto a defender, también, que la amnistía no es ninguna "cuestión de fe" porque los indultos ya han funcionado como conejito de indias. Y es más, ha reivindicado que la amnistía contará con el apoyo de 178 diputados de la cámara española; no como los indultos, que es una medida que concede el Gobierno sin necesidad que pase por la cámara baja.

 

El líder del PSOE, paralelamente, ha instado al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, a "reflexionar" si quiere mantener sus alianzas y pactos con Vox en las autonomías y municipios donde gobiernan en coalición. El líder socialista ha definido al partido de extrema derecha como un "partido de odio", después de que Santiago Abascal haya asegurado que en algún momento la ciudadanía querrá "colgar por los pies" a Sánchez de la misma manera que se hizo con Benito Mussolini. El jefe del ejecutivo español ha asegurado que las declaraciones del líder de Vox solo responden a la necesidad de la formación de marcar la agenda política, y es por eso que ha teledirigido su contraataque contra el PP. De la misma manera, ha pedido diferenciar "entre insultadores e insultados" y entre aquellos que perpetran un "asedio" y los que lo sufren, en referencia a las manifestaciones convocadas delante la sede socialista de Ferraz.

Durante la charla, Sánchez ha opinado que durante la campaña del 23-J los ciudadanos españoles comprobaron de primera mano cómo el PP usaba "mentiras" para batallar al PSOE. Y también ha asegurado que "todo el mundo", incluida la oposición, entendió que el día siguiente del 28-M convocara elecciones, a causa de la victoria abrumadora de PP y Vox contra PSOE y Podemos a las elecciones autonómicas y municipales. Ha hecho broma también por el sobrenombre de 'perro Sánchez' que la derecha le puso, y cómo su equipo supo darle la vuelta en la pasada campaña y sacarle provecho, con una campaña en redes alrededor del Día del Perro y de memes sobre el 'perro sanxe'.