Pedro Sánchez ha anunciado este miércoles en su comparecencia en el Congreso de los Diputados varias medidas para combatir la corrupción. El presidente del Gobierno ha propuesto poner en marcha un sistema de exclusión y listas negras para impedir que las empresas condenadas por corrupción puedan seguir siendo contratadas, así como la retirada de subvenciones públicas a aquellos partidos políticos que mantengan en sus listas, estructuras u órganos de dirección personas condenadas por corrupción.
De hecho, ha propuesto endurecer las penas en el Código Penal para este tipo de delitos y duplicar los plazos de prescripción, así como crear nuevas secciones de delitos contra la administración pública con "jueces especializados". El presidente español también pretende crear procedimientos sumarios por causas que involucren cargos públicos para evitar dilaciones que "disminuyen la confianza" de los ciudadanos. Ha anunciado la introducción de una figura que permitirá requisar bienes vinculados a actividades delictivas sin necesidad de condena penal previa.
También ha anunciado la creación de una agencia estatal independiente para prevenir, supervisar y perseguir delitos de este tipo; así como hacer uso de la inteligencia artificial para identificar "patrones anómalos o indicios de fraude". Se trata de medidas, según ha asegurado el jefe del ejecutivo, trabajadas entre PSOE, Sumar y técnicos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) basadas en las exigencias de los socios parlamentarios.
Sánchez asegura ahora que ha valorado dimitir
Durante su intervención, Sánchez ha asegurado que, a causa del caso Santos Cerdán, ha estado valorando durante este último mes dimitir como presidente del Gobierno y anticipar elecciones generales. "Sería la solución más sencilla para mí y para mi familia; pero tirar la toalla no es nunca una opción; soy un político limpio", ha asegurado. El máximo líder socialista ha vuelto a pedir disculpas a toda la ciudadanía, a sus aliados parlamentarios y especialmente a sus votantes.
"Subo a este atril sintiendo decepción conmigo mismo", ha asegurado, en referencia a la "traición" sufrida por los dos hombres a quienes entregó el timón del PSOE mientras él estaba en la Moncloa, a Cerdán y José Luis Ábalos. Ha vuelto a afirmar que se equivocó cuando confió en ellos, así como cuando ignoró los rumores que situaban al último secretario de Organización de su partido al frente de la trama corrupta; a quién no fulminó hasta que no se hizo público el demoledor informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. "A pesar de la rapidez de mi reacción, los mecanismos de control interno de mi organización no funcionaron correctamente", ha admitido ante el Pleno de la cámara baja.
Sánchez dice que su Gobierno y el de Zapatero han sido "los más limpios de la democracia"
Más tarde, una vez Sánchez ha tenido que responder a las intervenciones posteriores de los grupos, ha entonado el y tú más y ha asegurado que su gobierno y el de José Luis Rodríguez Zapatero "han sido los más limpios de la democracia". A pesar de haber destacado "las grandes cosas" que hizo Felipe González durante su etapa al frente del ejecutivo, ha reconocido los enormes casos de corrupción que acompañaron los mandatos de este expresidente socialista. Y ha recordado las irregularidades que acompañaron a José María Aznar y Mariano Rajoy cuando estuvieron al frente del PP y de la Moncloa.
"El Tribunal Supremo cifra hoy en cinco millones de euros la cantidad de dinero implicada en la corrupción de Cerdán, Ábalos y Koldo; mientras que la sentencia del caso Gürtel habla de 123 millones", ha comparado. Y ha pronosticado entonces que si Alberto Núñez Feijóo llega a la Moncloa "introducirán una medida para salvar la pareja de Isabel Díaz Ayuso".
Sánchez admite que Junts "no es socio" del Gobierno
Más tarde, en su réplica al discurso de Míriam Nogueras, Sánchez ha reconocido que Junts per Catalunya "no apoya" al Gobierno porque "no es un socio". "Cada semana nos tenemos que ganar su confianza", ha asegurado en un debate en el que la líder de esta formación independentista ha rechazado "entrar en el juego de elegir entre el menos corrupto". En su respuesta al resto de socios, Sánchez ha prometido avanzar en políticas sociales, pero ha descartado someterse a una cuestión de confianza como le ha pedido Coalición Canaria y le han planteado formaciones como el PNB y Compromís