El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de Podemos, Pablo Iglesias, se reunieron este jueves en la Moncloa para explorar acuerdos legislativos, principalmente los referentes a los presupuestos del 2019, que deben presentarse antes del próximo octubre. La noticia la ha adelantado La Vanguardia. Mientras Sánchez avanza en la estabilización de la mayoría multicolor que apoyó su moción de censura, aún no hay fecha para el encuentro con el president Quim Torra, según ha dicho este sábado la ministra de Administraciones Públicas, Meritxell Batet.

El encuentro con Iglesias confirma la intención de Pedro Sánchez de dar prioridad a Podemos en su política de alianzas. El socialista necesita asegurarse otros apoyos parlamentarios más allá de los 84 diputados del PSOE si quiere sostener su acción de gobierno.

Sánchez e Iglesias exploraron las leyes que pueden impulsar juntos, según fuentes de la Moncloa, que quitaron hierro a la reunión. “Se enmarca dentro de las reuniones de trabajo normales del presidente”, explicaron. La cita, sin embargo, no fue anunciada ni incluida en la agenda oficial de Sánchez, como tampoco en la del líder de Podemos. Uno y otro evitaron dar cuenta de su reunión.

Prioridades

Podemos ya ha presentado de nuevo cerca de veinte proyectos de ley, cuya tramitación había paralizado la mayoría PP-Cs en la Mesa del Congreso, bloqueo desautorizado por un reciente dictamen del Tribunal Constitucional. Esas leyes podrán tramitarse de nuevo. El grupo socialista hará otro tanto con otros 40 proyectos de ley vetados por la Mesa. El contenido de esos proyectos y el modo de desarrollarlos fue el tema de conversación entre Sánchez e Iglesias.

Fuentes de la Moncloa han dicho a eldiario.es que “reuniones de este tipo con otros líderes políticos se van a mantener”, sin especificar con quién ni su orden. A tenor de las declaraciones de Batet y del contenido del programa legislativo de Iglesias, el conflicto catalán está ausente de la agenda legislativa de ambos partidos.

Iglesias expuso sus prioridades legislativas el pasado viernes ante el Consejo Ciudadano Estatal de Podemos. Se trata de iniciativas para corregir políticas del PP: blindar la revalorización de las pensiones con el IPC y eliminar el factor de sostenibilidad, impulsar permisos de maternidad y paternidad iguales e intransferibles, derogar la ley mordaza y las dos últimas reformas laborales, elevar a mil euros el salario mínimo, aprobar la renta garantizada o cerrar los centros de internamiento de extranjeros (CIE).

Iglesias también recordó entonces que la legitimidad del gobierno de Sánchez se sustenta en los votos del PNV, ERC y el PDeCAT.

Diferencias y parecidos

Una parte de la agenda legislativa de Podemos no encaja con la del PSOE. Respecto al techo de gasto, asunto crucial para confeccionar los presupuestos, los morados quieren cambiar ese concepto, promovido por el directorio económico de la UE, y sustituirlo por su contrario: el “suelo de ingresos”.

Respecto a las dos reformas laborales, la primera fue aprobada durante el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y el PSOE solo acepta enmendarla. Sobre la última reforma de la ley de Seguridad Ciudadana, la ley mordaza, los socialistas apenas quieren corregir varios artículos. El PSOE, de entrada, se opone a otras propuestas de Podemos: la ley Antidesahucios, el cierre de los CIE, la recuperación del rescate bancario o la reforma electoral que Podemos pactó con Ciudadanos.

En otros asuntos, socialistas y podemitas están más cerca. Es el caso del salario mínimo, la indexación de las pensiones al IPC, la igualdad retributiva, la igualación de los permisos de maternidad y paternidad, la aplicación y dotación de la ley de dependencia, la reforma de la ley de Arrendamientos Urbanos, la extinción del llamado impuesto al sol o la reversión de los recortes en sanidad y educación públicas de los gobiernos del PP.