El conseller de Interior Miquel Sàmper habla del presente inmediato y no ha valorado todavía el futuro del mayor Josep Lluís Trapero después de confirmar su absolución. Ni de Trapero, ni de la cúpula de los Mossos: la intendente Teresa Laplana, el exsecretario general de Interior César Puig y el exdirector general del cuerpo policial Pere Soler.

Ahora, hace falta absorber la buena noticia: "Lo que queremos es que toda la cúpula de Interior se recupere de lo que han sido tres años de dolor personal. No hay nada pactado ni pensado, cuando estén recuperados hablaremos de su futuro profesional", ha admitido Sàmper.

A pesar de la insistencia de los periodistas presentes en la rueda de prensa, el conseller ha admitido, con toda sinceridad, que ni él mismo se lo cree. Con su bagaje y experiencia como abogado, estaba convencido de la inocencia de estos, pero con los precedentes de la justicia española, esperaba otro desenlace: "No tenía nada claro que la sentencia fuera absolutoria, he hecho apuestas y las he perdido todas". Y ha añadido: "Yo vengo del mundo de la Justicia y valoro mucho el valor de la injusticia. La posibilidad de que vuelvan se contemplará en su momento pero por ahora no está sobre la mesa". Sàmper ha cerrado filas.

Libertad para Forn

Lo que sí ha pedido nada más salir es la libertad para el conseller encarcelado Joaquim Forn, entonces en Interior, quien fue juzgado por la celebración del referéndum del 1 de octubre: "Es necesario que se haga justicia con el conseller Joaquim Forn, debe restablecerse una injusticia". Forn está condenado a diez años y medio por sedición, un aspecto que no se contempla para la cúpula de los Mossos.

Ha descrito todo el proceso que han vivido los últimos tres años Trapero y sus miembros de "sufrimiento" y "dolor" . Estas palabras también han sido compartidas por la abogada del mayor, Olga Tubau, quien ha admitido que todos están en una "bomba emocional". De Trapero, ha explicado que hacía años que no le veía "una sonrisa" en la cara.