"Escuchar en democracia es esencial", ha advertido a la exconsellera Irene Rigau después de citar a Antonio Machado tan pronto como ha tomado la palabra ante el tribunal para hacer su último turno. Visiblemente emocionada, ha admitido la tristeza que este episodio provoca en el último tramo de su carrera política y, ha alertado sobre el riesgo que este proceso obra "un camino de involución democrática".

Antes, Rigau ha evocado la manifestación que 40 años atrás se hizo en Catalunya con el lema Libertad, Amnistía y Estatuto de Autonomía y el impulso que representó para la democracia. "Se toleró, aunque no se autorizó, y supuso el empuje más fuerte desde Catalunya a la democracia española", ha recordado.

Al hilo de esta reflexión, se ha exclamado: "No me depuró el franquismo y me tiene que condenar la democracia por un delito que no he cometido"?.

La exconsellera, que ha sido la última en intervenir ante el tribunal, ha remachado el argumento de Artur Mas y Joana Ortega para insistir en que no desobedecieron al TC. "Si suspendíamos la consulta el Parlament nos habría reprobado", ha argumentado.

Rigau ha subrayado la voluntad del Govern de preservar el papel de los funcionarios de Ensenyament. En este sentido, ha asegurado que "los directores han sido y son en Catalunya una pieza clave para el sistema" y "evidentemente" no habrían sido utilizados para razones políticas. "En educación el criterio moral es clave", ha remachado.