En plena jornada del 12 de octubre, día de la Hispanidad, Carles Puigdemont se ha pronunciado contra el sentido y la celebración de la fiesta nacional española. Desde el exilio, el president ha aprovechado las redes sociales para contraponer el significado de esta fecha con las conmemoraciones nacionales de otros países. “Una parte importante del mundo hispánico aún espera que España pida perdón por la conquista y colonización del continente americano, pero los españoles siguen haciendo de ello su fiesta nacional”, ha tuiteado Puigdemont, en una crítica directa a la persistencia de un relato que, a su parecer, no afronta las heridas del pasado. “Alemania celebra su reunificación, Italia conmemora la república surgida de la derrota del fascismo. Francia, su revolución. Portugal recuerda a su ilustre poeta Luis Vaz de Camoes. Estados Unidos, el día de su independencia… Su fiesta los define”, ha añadido. El mensaje de Puigdemont llega el mismo día que el president de la Generalitat, Salvador Illa, participa en los actos institucionales del 12 de octubre en Madrid, y que diversos sectores constitucionalistas y de extrema derecha han promovido celebraciones en Catalunya.
Una part important del món hispànic encara espera que Espanya demani perdó per la conquesta i colonització del continent americà, però els espanyols en continuen fent la seva festa nacional. Alemanya celebra la seva reunificació, Itàlia commemora la república sorgida de la…
— krls.eth / Carles Puigdemont (@KRLS) October 12, 2025
El posicionamiento crítico de Puigdemont contrasta radicalmente con la manifestación españolista que ha tenido lugar en el centro de Barcelona con motivo del 12 de octubre. Según la Guardia Urbana, unas 3.700 personas han participado en la movilización convocada por entidades como Catalunya Suma y España y Catalanes, con el apoyo del PP, Vox, Ciudadanos, Societat Civil Catalana y la fundación DENAES. Los manifestantes, muchos con banderas españolas y proclamas patrióticas, han aprovechado el acto para cargar contra el independentismo, con cánticos como “Puigdemont a prisión”. También contra el ejecutivo español: “Pedro Sánchez hijo de puta”. A pesar de los intentos de la organización por desmarcarse, también se ha podido ver simbología franquista y carteles con el rostro de Franco. Además, en un discurso que ha diferido frontalmente del tuit de Puigdemont, el portavoz Javier Megino ha defendido que “hoy es el verdadero día nacional de los catalanes” y ha proclamado que “Barcelona se ha convertido en la capital de la hispanidad”.
Mientras en Catalunya se encendía el debate por la celebración del 12 de octubre, en Madrid el president de la Generalitat ha asistido por segundo año consecutivo a la fiesta nacional española. Durante la espera protocolaria a la llegada del presidente del Gobierno y del rey Felipe VI, se han podido ver conversaciones e interacciones significativas entre Illa y diversas figuras institucionales. Una de las más destacadas ha sido con el presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, con quien el jefe del Govern ha conversado tapándose la boca, justo en un momento clave en que la ley de amnistía está pendiente del pronunciamiento de este órgano. También ha sido notorio el abrazo que se han dado Illa y la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, que es a la vez la candidata del PSOE en las próximas elecciones andaluzas y que recientemente ha manifestado su rechazo al pacto con ERC para un modelo de financiación singular para Catalunya.
