El PSOE sigue apagando fuegos en el partido. La última polémica la ha provocado el expresidente extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra, al comparar la amnistía con "violar a 40 millones de españoles". La ministra de Educación en funciones y portavoz del PSOE, Pilar Alegría, ha censurado sus palabras y le ha pedido "contención". "Siempre respeto la opinión de cualquier ciudadano y más de personas tan importantes dentro de mi partido, pero sí que les pediría contención a la hora de utilizar ciertos verbos que no aportan nada de positivo", ha afirmado la ministra en una rueda de prensa en Huesca, en la que ha valorado la reunión entre el líder del PSOE, Pedro Sánchez y la de Sumar, Yolanda Díaz.
Aunque dirigentes de la vieja guardia socialista, como el expresidente Felipe González o el exvicepresidente Alfonso Guerra, se habían pronunciado contra la amnistía, Ibarra ha ido mucho más allá. "¿Cómo se puede soportar que alguien viole a 40 millones de españoles? Porque quien viola la Constitución me está violando a mí, está violando mi voto", ha criticado, asegurando que una amnistía serviría para que los españoles fueran "más desiguales" y constituiría una "traición" a los votantes del PSOE.
Alegría asegura que los acuerdos para la investidura serán "claros y transparentes"
Alegría ha dejado claro que el ejecutivo no quiere que Catalunya vuelva a la "confrontación y a la ruptura" del año 2017, y ha defendido que hay que seguir transitando los caminos que "llevan a mejorar la convivencia". En la línea del resto de dirigentes del PSOE, la portavoz ha evitado pronunciar la palabra amnistía, pero ha asegurado que los acuerdos que se alcancen con el resto de grupos para investir a Sánchez presidente serán "claros y transparentes" y estarán en coherencia con la línea política socialista, basada en "el reencuentro, la convivencia y la Constitución". Sí que se ha referido al referéndum para afirmar que el PSOE mantiene "la misma opinión que la mayoría de catalanes y ciudadanos del país".
El líder popular, Alberto Núñez Feijóo, auguró este martes que las negociaciones del PSOE serían "oscuras", pero la ministra lo ha descartado. "Nosotros no nos movemos en el oscurantismo ni en la opacidad", ha asegurado, y ha explicado que "hay un diálogo en un marco de confianza y discreción". "Cuando se llegue a un acuerdo, que no se preocupe ningún ciudadano, seremos absolutamente claros y transparentes", ha insistido. Por otra parte, ha defendido, contrariamente a los postulados de la derecha, que las urnas decidieron el 23-J que Sánchez repitiera como presidente. "El único gobierno posible es un gobierno de coalición progresista encabezado por Pedro Sánchez. Así lo decidieron los ciudadanos el 23 de julio y así sigue siendo hoy, a 4 de octubre," ha remachado.