El PSOE ha pedido a todos sus cargos públicos eliminar la Q+ de las siglas LGTBIQ+, según una resolución de la Comisión Federal de Ética y Garantías del partido, cuando se pronuncien en nombre del partido. Según el documento, fechado el 7 de agosto, la comisión insta al Comité Ejecutivo Federal a anular "con carácter inmediato" las resoluciones políticas que introducen los términos Q y/o + en el ideario del partido en las diferentes federaciones "con el fin de salvaguardar la unidad, la coherencia y el respeto a los acuerdos democráticamente adoptados". Asimismo, la resolución pide informar a todos los cargos públicos y orgánicos del partido de la obligatoriedad de acatar y aplicar las resoluciones emanadas de los organismos decisores del PSOE cuando se pronuncien en su nombre. El Plenario del 41 Congreso Federal del PSOE, celebrado a finales del pasado mes de noviembre, aprobó una enmienda de una de las corrientes feministas dentro del partido con el fin de modificar la ponencia marco de los estatutos de los socialistas y eliminar las siglas Q+ de las referencias que se hacían dentro de este texto al colectivo LGTBIQ+, alegando que las siglas amparaban "un significado misógino, ultraliberal y antifeminista", adoptando el discurso TERF que está triunfando en países como el Reino Unido.
Las siglas Q+ fueron borradas de la documentación oficial del PSOE a finales del año pasado, a raíz de una votación en el 41.º Congreso Federal de la formación, que es el organismo interno que decide las líneas políticas e ideológicas que tienen que seguir los miembros y cargos de la organización política. Estas siglas hacen referencia a dos realidades diferentes: por una parte, la Q es la sigla del término queer, que define a las personas que no suscriben la división binaria tradicional del género y rechazan identificarse como hombre o mujer, o con una orientación sexual y de género específica; por otra parte, el símbolo + identifica a todos a los colectivos que no están representados de forma específica con una letra, pero que también están presentes, como el género fluido, la asexualidad o cualquier otra identidad. A pesar de la decisión tomada en Sevilla, algunas federaciones como la de Madrid, País Valencià, Castilla y León, Cantabria, Murcia o Aragón decidieron incluir la Q y/o el símbolo + en las resoluciones de las respectivas ponencias políticas de sus congresos.
Federaciones "rebeldes"
A raíz de la aparición de las siglas en estos documentos de las federaciones, la corriente impulsora de la enmienda aprobada durante el congreso federal decidió elevar dos protestas a los organismos internos de dirección y de garantías. La primera, ante el comité ejecutivo federal, el pasado mes de febrero, que no recibió respuesta, y que provocó la segunda protesta ante el comité de garantías el pasado 22 de mayo, según indica la información publicada por Público. En los escritos, pedían la anulación de las resoluciones autonómicas que incluyeran la Q o el + y un pronunciamiento para recordar a todos los cargos públicos y orgánicos que no utilizaran estas siglas cuando actuaran en nombre del PSOE. Concretamente, solicitaban que se corrigieran aquellas resoluciones políticas y las declarara nulas "para mantener la coherencia y la unidad de acción política emanada de la voluntad inequívoca expresada por el plenario del Congreso Federal".
En su decisión del pasado jueves, más de dos meses después de la presentación de la demanda, el comité de garantías ha resuelto dejar anuladas y sin efecto las resoluciones de las federaciones que hagan uso de las siglas Q+, ya que vulneran lo que se acordó en el congreso de diciembre y porque no serían en ningún caso aprobadas por el comité federal, que tiene que dar el visto bueno a estos documentos. Con respecto a la posición de los cargos públicos, la resolución recuerda que "todos los compañeros tienen el deber de cumplir lo acordado por el máximo organismo del partido, el congreso federal, cuyo mandato es 'vinculante y obligatorio'", según recoge el diario Público. Según datos del CIS y del informe Estado del Odio de la FELGTBI+, un 11,6% del total de la población del Estado español es LGTBIQ+. Más de la mitad de estos, un 51,50%, se declaran bisexuales, un 17,5% gais, un 11% lesbianas, un 8,5% no binarias, un 8,25% asexuales, un 6,75% trans y un 0,5% intersexuales, pero no existen datos estadísticos sobre el porcentaje de población queer dentro del colectivo ni en general.
Sectores feministas contra el movimiento queer
El sector feminista del PSOE que ha liderado la lucha interna contra las siglas Q+ es la expresión española del movimiento TERF (Feminista Radical Trans-Excluyente, según las siglas en inglés), que es internacional y que busca luchar contra las partes del colectivo LGTBIQ+ que consideran "antifeministas" y que, en opinión suya, buscan borrar a la mujer y su lucha, así como colonizar y apropiarse del movimiento LGTBI. Esta oleada tiene mucha fuerza, por ejemplo, en Reino Unido, donde el partido Laborista del primer ministro Keir Starmer ha decidido recientemente que cualquier referencia a la mujer en su partido o sus políticas hace únicamente referencia a las "mujeres biológicas", es decir, a las personas nacidas de sexo femenino, lo que excluye a las mujeres trans. En Reino Unido también, hace unos meses el Tribunal Supremo decidió que la definición legal de la mujer está basada en su sexo biológico y que, por lo tanto, las mujeres trans no podían ser beneficiarias de las protecciones y normas basadas en el sexo.
La votación de la enmienda referida a las siglas Q+ en el congreso federal del PSOE en Sevilla a finales del año pasado causó alboroto mediático y provocó las críticas por parte de representantes del movimiento LGTBIQ+ y de otros partidos políticos. Por su parte, Mar Cambrollé, histórica activista para los derechos LGTBIQ+ y portavoz de Plataforma Trans, se ha referido este lunes a la decisión del consejo de garantías de los socialistas y ha dicho que "de nuevo, el sector reaccionario, el sector transodiante, en el PSOE impone su voluntad". "El PSOE impide el avance en derechos, sobre todo desde el no reconocimiento de las diferentes identidades. Se empieza sacando letras y se acaba sacando derechos", ha sentenciado la activista. También se ha pronunciado sobre la decisión de Irene Montero, exministra de Igualdad y eurodiputada de Podemos, que ha añadido que "decisiones como esta del PSOE son el primer paso del odio, la LGTBfobia y la transfobia".
Intervención completa de .@CambrolleMar en #ANHP, a raíz de la eliminación -por parte del PsoE- de la letra "Q" de la denominación del colectivo LGTBIQA+: "Se empieza quitando letras y se termina quitando derechos".
— Santi🔻 (@unodeldiezE) August 11, 2025
¡Enorme, Mar! Hay que escucharla 👇🏼
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