El PSOE ha aceptado finalmente, después de muchas presiones de sus socios de Podemos y de los partidos a la oposición, que el excomisario José Manuel Villarejo comparezca en la comisión de investigación del caso Kitchen, sobre el uso irregular de medios desde los ministerios del Interior de los gobiernos de Mariano Rajoy.

El PSOE se ha esperado hasta la reunión de la comisión este jueves, después del pleno, para dar marcha atrás a su negativa inicial y asumir que la presencia de Villarejo puede ser polémica, pero también clave para aclarar cómo se montó esta operación que llegó a promover el espionaje desde Interior al extesorero de PP, Luis Bárcenas.

La comisión del Congreso ha decidido también citar al expresidente Mariano Rajoy; la exsecretaria general de PP, María Dolores de Cospedal, y a la cúpula de Interior en la etapa en la que Jorge Fernández Díaz fue ministro.

En concreto, la comisión que preside la socialista Isaura Leal ha aprobado dos listas de comparecientes: la del PNV y la del PSOE. Los nacionalistas vascos sólo incluían dos nombres y han conseguido unanimidad. Uno de sus comparecientes es Villarejo, solicitado por Unidas Podemos y toda la oposición, pero excluido de la relación de nombres planteada por el PSOE.

Y la lista de los socialistas contiene, entre otros, al expresidente Rajoy, Cospedal y su marido, el empresario Ignacio López del Ferro; el exministro Fernández Díaz y quien fue su secretario de Estado Francisco Martínez.

En las dos listas que han salido adelante, al recaudar más síes que nos, se incluye también a Enrique García Castaño, que era jefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) y la otra pata del entramado criminal que, según la Fiscalía, montó Villarejo. Su comparecencia era la única que solicitaban todos los partidos.

El PP, que es el partido que gobernaba y mandaba en Interior durante el montaje de la Operación Kitchen, se presenta ahora como liberado de los vínculos con este pasado, con el argumento de que sus protagonistas políticos ya no están en primera fila de la política. Se han rechazado sus peticiones de hacer comparecer al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, y diversos ministros socialistas actuales y pasados de Interior, Defensa y Justicia; la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, y el exmagistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón.