Después de más de tres años de prisión preventiva, José Manuel Villarejo podrá volver a pisar la calle. El magistrado de la Audiencia Nacional e instructor del caso Tándem, Manuel García-Castellón, ha acordado la puesta en libertad provisional del comisario jubilado, que este año expiraba el plazo máximo para la prisión sin sentencia condenatoria. Desde noviembre de 2017 se encuentra a la prisión de Estremera, en Madrid, por donde también pasaron los presos políticos independentistas en su momento. Probablemente esta tarde ya saldrá del centro penitenciario.

El magistrado instructor ha decidido ponerlo en libertad justamente ante la imposibilidad de empezar el juicio oral antes de noviembre de este año, cuando expira el plazo máximo legal de la prisión preventiva, que es de dos años, más dos prorrogables. En el escrito, el juez que el estado de la tramitación de la pieza principal y de las separadas continúan en fase de instrucción.

 

Eso sí, le impone medidas cautelares: comparecencias diarias ante el juzgado, retirada de pasaporte con prohibición de obtener uno nuevo, prohibición de salida del país y la comunicación de cualquier cambio de domicilio o residencia. Si se incumpliera alguna de estas medidas, García Castellón revisaría su situación.

En un giro inesperado de guion, ha sido la Fiscalía Anticorrupción la que ha solicitado hoy mismo su puesta en libertad provisional. Lo ha pedido después de que la misma sala cuarta de la sala de lo penal de la Audiencia Nacional rechazara el recurso del ministerio público y confirmara la libertad provisional en las tres piezas separadas que se juzgarán a partir del próximo diciembre.

En su escrito, la Fiscalía Anticorrupción argumentaba que no hay riesgo de fuga por su arraigo familiar, profesional, social y económico. El ministerio público señalaba que tiene su residencia establecida a Boadilla del Monte (Madrid), donde estaría con su mujer y su hija menor de edad. Subrayaba que este inmueble era próximo a un juzgado, "lo que indudablemente facilita su vigilancia y control". Además, según la Fiscalía, todo su patrimonio está "sujeto al proceso" y, por lo tanto, "minimiza un hipotético riesgo de fuga que sería difícilmente imaginable en esta pandemia global".

Absuelto del primer juicio

El pasado 25 de enero, el excomisario recibió la primera sentencia de las muchas causas judiciales que tiene abiertas. Concretamente, el juzgado número 8 de Madrid absolvió a Villarejo de los delitos de injurias y denuncia falsa de los cuales había sido acusado por parte de Félix Sanz Roldán, exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). En la vista oral, celebrada aquel mismo mes, declaró la examante del rey Corina Larssen. La empresaria acusó a la inteligencia española de amenazarla siguiendo órdenes del rey emérito, Juan Carlos I. La Fiscalía le pedía un año de prisión e inhabilitación y el CNI le pedía dos años de privación de libertad.