El Gobierno no ha mostrado ningún tipo de flexibilidad este martes ante la propuesta de Esquerra Republicana para celebrar un referéndum siguiendo la vía de Montenegro. "Quien descarta la vía unilateral soy yo", ha enfatizado el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, al ser preguntado sobre una consulta que no contara con el aval de Madrid. "Estamos precisamente en una situación de superación de un enfrentamiento para conseguir que en Catalunya la convivencia esté garantizada", ha añadido.

El ministro de la Presidencia ha hecho estas declaraciones en una entrevista en TVE en la cual ha insistido que "el referéndum es contrario a la Constitución" y que en ningún caso es una solución para resolver el conflicto político entre Catalunya y España. Asimismo, ha recordado que la Moncloa y la Generalitat pactaron "que el Gobierno haría política dentro de los procedimientos democráticos y las instituciones". "Parece una obviedad, pero es que en 2017 eso no pasaba", ha asegurado. Asimismo, ha opinado que una consulta para decidir el futuro político de los catalanes "solo crearía enfrentamientos".

Los hechos del 1-O todavía se pueden perseguir

Por otra parte, y contradiciendo la versión que da Esquerra Republicana después de haber pactado con el Gobierno la modificación del delito de malversación, Bolaños ha asegurado que "no hay ni un solo hecho de la sentencia del Procés que ahora quede despenalizado" con la revisión del Código Penal. "Todos ellos están penalizados con los desórdenes públicos agravados o con el desvío irregular", ha añadido. Dicho esto, ha dejado en manos del Tribunal Supremo "comprobar o decidir si es procedente alguna revisión de las penas".

Por otra parte, pero en la misma línea, ha afirmado que encuentra "lógico" que ERC asegure que con la modificación pactada de la malversación los hechos del 1-O están despenalizados, pero ha querido dejar claro que eso no es así: "Hemos establecido que cuándo hay un desvío de fondo dentro de la misma administración pública tiene que tener un castigo penal". Se trata, tal como pactaron este lunes republicanos y socialistas, de un tipo que se puede castigar con uno a cuatro años de prisión, ligeramente por debajo de los seis años con los cuales se puede castigar la malversación agravada.

Contradice a Carmen Calvo: no mantendrán la enmienda a la ley trans

Por otra parte, Bolaños ha contradicho a la exministra Carmen Calvo, que este lunes aseguró que el PSOE mantendría su enmienda sobre menores a la ley trans, por mucho que fuera tumbada por el PP y Podemos en la comisión de Igualdad. "Es cierto que nos quedamos solos", ha admitido el ministro de la Presidencia, además de argumentar que no tendría mucho sentido volver a perder la votación en el Pleno.