Es de gran utilidad hoy comparar los diarios de Madrid. Mientras El País da un repaso, en sentido literal y figurado, de los planes del gobierno regional y concluye que son de cartón piedra, los otros tres diarios se esfuerzan en encontrar todo tipo de excusas para no decir lo que todos ven meridianamente claro, como ayer explicaba el director de esta casa y hoy Iu Forn en su columna. Parece que la consigna es no hacer sangre y perdonar la vida de la presidenta Isabel Díaz Ayuso. Es la fiesta del pretexto, el descargo y la evasiva. El País suelta alguna muy fría, comola implantación de controles policiales aleatorios para vigilar el cumplimiento de las restricciones, controles muy típicos de las democracias consolidadas y las monarquías modernas.
Se nota la desesperación de El Mundo, ABC y La Razón. Incluso resucitan como voz de prestigio a José Manuel Franco, delegado del gobierno en Madrid (sí, el gobierno español tiene un delegado en Madrid), a a quien no hace ni un mes perseguían para empapelarlo en aquel caso fabricado que pretendía relacionar la manifestación del 8-M con la propagación de la covid-19. Franco era entonces Satanás. Franco es ahora Moisés bajando del Sinaí, pues dice que todo el mundo lo ha hecho mal y echa la culpa del caos sanitario de Madrid a los madrileños, que en el mes de junio "se relajaron". Como se nota que el suyo es un cargo no electo.
ABC, también entrevista al consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, que promueve una nueva teoría conspiranoica: el gobierno central quiere desprestigiar a Madrid. Él mismo, sin embargo, no descarta "cerrar la ciudad" si las restricciones no funcionan. ¿Cómo se entiende? ¿No será él quien conspira contra Madrid? Es una conversación relajada, donde Ruiz considera que "del cierre de la ciudad hay que hablar con naturalidad", así, tan ricamente. El Mundo refuerza sus bombas de humo con un reportaje donde explica que los científicos ya lo habían dicho y otro donde descubre que "una docena de provincias tienen activo algún tipo de confinamiento por el coronavirus", como queriendo decir que Madrid no es una excepción y no se debe exagerar eh.
La Razón hace un poco lo mismo pero con más cafeína, porque lleva el titular que dejará salivando a sus lectores: "Vuelta del Ejército a la calle". Así, sí. También ha descubierto que son 40 (y no una docena) los municipios y zonas en once autonomías que aplican restricciones por la covid-19, como Madrid. En su web destaca Lleida y Ribadeo, que con 140.000 y 9.800 habitantes, respectivamente, son perfectamente comparables con la capital de España. Es decir, no pasa nada. Madrid es una más entre tantas comunidades y municipios pero un pooooco más afectada, no hay que hacer tantos aspavientos.
La única ausente en todo este despliegue de excusas es la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Parece que en la gestión de la pandemia no ha tenido nada que ver. Es el nuevo periodismo, buscar todo tipo de pretextos para justificar el caos de los gobiernos y esconder la incompetencia de los gobernantes. Sería una anécdota si no fuera porque hay gente que muere.
