Hacía tiempo que varios expertos avisaban. Por ejemplo Àlex Arenas. Este físico y profesor de informática y matemáticas de la URV publicaba un tuit el pasado 19 de agosto:

Àlex Arenas

Claro que los expertos no son infalibles, pero el señor Arenas acostumbra a clavarlo. No costaba nada hacerle caso. Aunque fuera por si volvía a acertar. Si hubiera sido así, habría habido un mes de margen para revertir la actual situación. O como mínimo controlarla. Pero Madrit (más concepto que nunca) no se puede cerrar. De hecho este Madrit juega en otra liga, y ya lo hemos visto otras veces. Un amigo madrileño me explicó que todas las barras de los bares estaban totalmente abiertas sin restricciones y todo el mundo picaba del mismo plato como si no hubiera mañana. Mientras, los bares de Lleida han estado dos meses comiéndose los mocos. Y claro que la culpa no es de las barras de los bares, pero recuerde dónde estaba Lleida hace dos meses, dónde está ahora, y compare su situación con la de la capital de España.

No, Madrit no cierra ni cerrará. Ayer fue anunciar pequeñas medidas restrictivas de movimiento y en las carreteras de salida hubo hostias para huir espiritados. Cojonudo oiga. Esto y que varias avionetas sobrevolaran la ciudad rociando virus eran de las mejores cosas que podrían suceder para controlar la pandemia, sí. Y mientras, la presidenta Diaz Ayuso y el presidente Sánchez quedaban ayer para reunirse pasado mañana, porque como todo el mundo sabe los fines de semana el virus descansa, y hacían bueno el chiste aquel del tipo al que lo avisan un viernes por la tarde de que se le está quemando la empresa, que no quedará nada y que será su ruina total y él responde: "vaya, qué disgusto más terrible tendré el lunes". Pues eso.

Y es que como todo el mundo sabe, hay gente que no puede andar y masticar chiclé a la vez. Es el caso de la señora presidenta, que no podía hacer caso a Arenas y al resto de Arenas que avisaban del desastre que venía porque estaba demasiado ocupada bajando impuestos y diciendo que "los contagios se están produciendo, entre otras cosas, por el modo de vida que tiene nuestra inmigración en Madrid", una reflexión muy interesante porque quiere decir que 1/ Madrid tiene una inmigración diferente ("nuestra") a la del resto del planeta y 2/ Lo es tanto que, a diferencia de otras inmigraciones, esta expele coronavirus de manera espontánea, como si fueran esporas.

No, aquí no somos mejores ni somos más sabios que en otros lugares, incluido Madrit (concepto), pero aquí se han tomado medidas muy drásticas como las de igualada y Lleida y otras de muy importantes como las de l'Hospitalet o Girona. ¿Aquí hemos cometido errores y nos hemos distraído? Sí. A menudo. Pero después hemos espabilado. Con nuestros errores y con miles de coches huyendo también de BCN en su momento, pero el doctor Argimón ha puesto orden y el presidente Torra se lo ha tomado seriamente, a pesar de las grandes dificultades políticas.

Los madrileños que siguen la actualidad a través de los medios del régimen, ayer descubrieron que tienen un problema. Y grave. ¿Qué sorpresa, verdad? El relato oficial ha sido "dale todo y otra de callos y otra cañita". Y ahora pagan las consecuencias. Pero no pasará nada. Hasta que quizás algún día sí que pasará alguna cosa. Y entonces será demasiado tarde. Y mucha gente dirá: "esto se veía venir". Y entonces saldrá alguien y dirá: "Sí, ahora todo el mundo dice que se veía venir pero nadie hizo nada". Sí, son las cosas que suceden cuando el relato oficial tapa el sol con un dedo.