El abogado Jordi Pina ha tildado de "chapuza" la resolución de la Junta Electoral Central donde deja en manos del Supremo permitir el debate en la prisión propuesto por Jordi Sànchez. La JEC se declaró "no competente" para decidirlo y trasladó la decisión a la sala segunda del Supremo, donde se juzga el caso del 1-O, y dirigida por el juez Manuel Marchena.

En una entrevista en el programa Tot es mou de TV3, Pina ha explicado que la resolución ha sorprendido a las defensas e incluso al propio juez Marchena. En este sentido, ha criticado que la decisión de la JEC hace que el Supremo tenga que escoger entre si "dañar o no" los derechos políticos de las personas que están juzgando.

En cuanto al calendario del juicio, Pina ha aceptado que va "muy mal", ya que todavía quedan más de 400 testigos por declarar, se tienen que visionar todos los vídeos que hasta ahora no se han permitido y se tienen que elaborar numerosos informes. Según el abogado, el juicio no acabará hasta finales de junio o principios de julio.

Pina ha defendido que la retransmisión del juicio "ha calado" en la sociedad española y ha permitido que periodistas y medios de Madrid "se den cuenta de que han estado un año engañados". De hecho, ha asegurado que, después de ver las primeras declaraciones, varios periodistas le han preguntado "dónde está la violencia" que justificaría el cargo de rebelión del que se acusa a los líderes independentistas.

También ha cargado contra la declaración de un agente de la Guardia Civil que comparó el 1-O con las épocas más duras de ETA en el País Vasco. "No es justo", ha criticado, asegurando que allí "había violencia de verdad".