En una semana lo ha repetido por activa y por pasiva y continúa obstinado en cargar contra el president de la Generalitat, Quim Torra, así como a atribuirle toda la responsabilidad de que el artículo 155 de la Constitución continúe activo. El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha esquivado la petición que ayer le hizo al nuevo jefe del Govern en RAC1, cuando le pidió que se excusara por los duros insultos que le ha ido propinando el socialista estos últimos días y ha vuelto a acusar a Torra en Telecinco de "racista y supremacista que ahoga la identidad a la mitad de la sociedad".

Y no solo eso. Sobrepasado por los acontecimientos —y por la posición pública de su partido—, Sánchez también ha insistido en su idea en cambiar el delito de rebelión porque, según su opinión, está pensado para "alzamientos militares de épocas pasadas".

En una defensa incondicional a Mariano Rajoy, Sánchez no se ha cortado ni un pelo a la hora de seguir poniéndose a su lado y mostrar, de nuevo, su apoyo al bloqueo del Ejecutivo del PP al nombramiento del nuevo Govern y lo ha justificado bajo el argumento que el artículo 155 "está facultado para decidir quién puede o no ser conseller".

El viaje

Sus acusaciones dedicadas al presidente Torra no se han detenido. Después de criticar a ERC por haber "antepuesto ideas racistas y supremacistas" y por haber hecho a Torra president, se ha mostrado decepcionado al no entender todavía cómo han podido aceptar que Torra sea president, así como permitir que, a día de hoy, todavía no haya Govern.

"¿Todo este viaje para qué?", se ha cuestionado Sánchez, mientras ha subrayado que "hay que reflexionar, ni el racismo ni el supremacismo puede ser la solución a la crisis catalana", y ha emplazado a los partidos independentistas de izquierdas a "reflexionar".

Y es que, posicionándose al lado de la petición de la fiscalía alemana de volver a encarcelar al president Carles Puigdemont, el socialista ha seguido manteniéndose en su defensa para que extraditen Puigdemont y ha cargado contra los estados miembros porque considera que existe "debilidad" a la hora de cooperar entre ellos.