Después de haber anunciado la polémica reforma de la sedición, el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha dado su punto de vista sobre cómo se tendría que haber gestionado el desafío independentista de 2017. Sobre este punto, en una entrevista en La Vanguardia, ha afirmado que "tendríamos que haber aplicado antes el artículo 155". En esta línea, Sánchez ha comentado que "uno de los principales errores que cometió el PP es dejar en manos de la justicia, exclusivamente, la respuesta a esta crisis constitucional".

Así pues, para Pedro Sánchez se tendría que haber intervenido antes "una situación que claramente había descarrilado con la aprobación de las leyes de desconexión del 6 y 7 de septiembre de 2017".

Sánchez defiende la reforma de la sedición

Con respecto a la decisión de Pedro Sánchez de reformar la sedición, él mismo ha explicado que "es un compromiso de investidura". "Siempre he dicho que estábamos decididos a homologar este delito con las principales democracias europeas. Las últimas semanas, hemos conocido que diferentes grupos políticos eran favorables, y por eso lo hemos planteado", ha indicado. Y ha señalado que "es un paso para la concordia en Catalunya. Una de mis satisfacciones mayores como presidente es ver que hoy en Catalunya prevalece la convivencia y no la confrontación.

También ha asegurado que con la reforma de la sedición no se facilita que Marta Rovira o Oriol Junqueras se vuelvan a presentar a las elecciones. Según Sánchez, el delito de sedición no concordaba con las actuales democracias europeas. Sobre la situación de los exiliados con la reforma de la sedición, Sánchez ha hecho referencia al caso del president al exilio, Carles Puigdemont. Sobre él, ha afirmado que está convencido de que comparecerá ante la justicia española. "Tendrá que rendir cuentas ante los delitos que se cometieron el año 2017", ha asegurado.

Sánchez alerta de la llegada de un gobierno reaccionario a España

El presidente español también ha advertido que "existe una amenaza real de un cambio de gobierno hacia posiciones más reaccionarias, lideradas por el PP y la ultraderecha." Es por eso que Sánchez ha reclamado la unión de las fuerzas progresistas. "Es de sentido común que, más allá de las estrategias de cada partido, los progresistas sepamos que hay más cosas que nos unen que las que nos separan, por muy personales o políticas que sean", ha afirmado.

Pedro Sánchez también ha aprovechado la ocasión para poner en valor el trabajo hecho por el gobierno de coalición español. En este sentido, ha expresado que "el trabajo del gobierno de coalición y la hoja de servicios que presentaremos conjuntamente en el 2023 habrá valido la pena y vale la pena seguir con cuatro años más de políticas y avances progresistas".

Sánchez vuelve a culpar a las mafias de la tragedia de Melilla

Sobre la tragedia ocurrida en la valla de Melilla, en la que murieron varios inmigrantes que intentaban entrar al estado español, el presidente español ha afirmado que "nos solidarizamos con los familiares de las víctimas" y que habrá "máxima transparencia y colaboración en la investigación de los hechos". Al mismo tiempo, sin embargo, ha asegurado que "tenemos que responsabilizar de todo este drama a las mafias que trafican con seres humanos".

Además, ha recordado que, durante los hechos de la valla de Melilla, 51 guardias civiles fueron heridos. Y lo ha remachado, apuntando que "España es un país solidario que coopera con los países de origen y de tráfico, pero también es deber de este gobierno proteger las fronteras de cualquier ataque violento". Con todo, Sánchez ha informado de que se ha enviado una misión del Congreso para investigar los hechos.