El Parlamento vasco ha mostrado hoy su apoyo al expresidente catalán Artur Mas y ha instado al Gobierno español a respetar que Catalunya, Euskadi o "cualquier otro pueblo" pueda decidir "libremente" su futuro "en función únicamente de la voluntad de la ciudadanía".

La iniciativa defendida por EH Bildu ha recibido también el apoyo del PNV, mientras que Elkarrekin Podemos se ha abstenido. Igual que el PP, los socialistas, socios del PNV en el Gobierno Vasco, han rechazado el texto. Así, de nuevo socialistas y nacionalistas han votado de manera diferente. En esta ocasión, fuentes de los dos partidos han precisado que se trata de una cuestión que queda al margen del acuerdo de coalición suscrito entre ambos.


A través del texto aprobado, el Parlamento Vasco manifiesta su apoyo a Mas, a la exvicepresidenta Joana Ortega y a la exconsellera de Ensenyament Irene Rigau, que serán juzgados a partir del lunes en el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya por la consulta soberanista del 9N.

La cámara suscribe que "consultar no puede ser delito" y emplaza al Gobierno español a seguir el camino del ejecutivo británico en Escocia para que "en Catalunya, Euskal Herria o cualquier otro pueblo que así lo quisiera pueda decidir libremente su futuro en función únicamente de la voluntad de la ciudadanía".

La convivencia no se puede imponer

Desde EH Bildu, Pello Urizar ha denunciado las "amenazas" que con "el argumento del imperio de la ley ha lanzado" el Ejecutivo de Mariano Rajoy contra la posible celebración de un referéndum en Catalunya, y ha advertido que "la convivencia no se puede construir con imposición".

Joseba Egibar (PNV) ha emplazado al Gobierno español a reconocer que Catalunya y Euskadi "son hechos nacionales que existen" y se ha dirigido a Rajoy para trasladarle que "quien niega la consulta no quiere conocer la verdad", ni que los catalanes "están inmersos en un proceso enorme".

Por su lado, Lander Martínez (Elkarrekin Podemos) se ha mostrado en contra de que los cargos políticos e institucionales sean "encausados o condenados" por llevar a cabo iniciativas para que "la voluntad de la ciudadanía se manifieste de manera democrática".

Negociación y pacto

El PSE-EE ha enmendado el texto a la totalidad para pedir a la Cámara autonómica que reconozca la existencia en Catalunya de "un problema político y de convivencia, propio de sociedades plurales y de la democracia", que tiene que resolverse mediante la "negociación y el pacto" y con "el máximo consenso, siguiendo las normas y los procedimientos jurídico-legales vigentes."

Su portavoz, José Antonio Pastor, ha apuntado que "Catalunya no se puede construir como nación sin un pacto previo entre los catalanes", ha defendido "el diálogo para conseguir acuerdos que sean sometidos a las urnas", y ha querido dejar claro que "ni una condena ni una absolución" de los encausado resolverán el problema del "encaje" de Catalunya en España.

Finalmente, Borja Sémper (PP) ha opinado que Euskadi "tiene que huir" de la "realidad social y política" actual catalana "como de la peste" porque, según su opinión, los nacionalistas están llevando a esa comunidad autónoma "hacia un callejón sin salida".