La decisión del gobierno andaluz, liderado por el popular Juanma Moreno, de imitar el modelo fiscal de Isabel Díaz Ayuso en Madrid y eliminar el impuesto de patrimonio la semana pasada ha suscitado la reacción por parte de las formaciones catalanas de izquierda. En el marco del debate de política general, se ha aprobado una propuesta de resolución en el Parlament que insta al Govern a mantener los impuestos de sucesión y de patrimonio, y evitar imitar el modelo de "dumping fiscal" en otros territorios del Estado. La resolución ha sido presentada por los comuns y ha provocado una nueva división de los socios del ejecutivo, en un momento en que la relación es crítica: ERC y el PSC han votado a favor, mientras que Junts se ha opuesto. Vox, Cs y PP también han emitido su voto en la misma dirección que los de Jordi Turull, mientras que la CUP se ha abstenido.

La resolución defiende que "en un contexto de incertidumbre económica y crecimiento de la inflación en que la Generalitat necesita muchos recursos económicos para hacer frente a las necesidades sociales de los ciudadanos y ciudadanas de Catalunya" es más necesaria que nunca mantener el modelo fiscal actual. Es por eso que insta al ejecutivo catalán a seguir apostando por un sistema de impuestos "justo y de redistribución de la riqueza, manteniendo el impuesto de patrimonio y sucesiones, a la vez que hay que rechazar las estrategias de dumping fiscal". "Hay que trabajar para establecer un suelo fiscal para fijar una recaudación mínima, respetando la capacidad normativa de las comunidades autónomas y la corresponsabilidad fiscal", añade, con el fin de evitar que haya regiones como Andalucía y Madrid en que se bajen algunas recaudaciones fiscales a cero.

En cambio, el Parlament ha rechazado una propuesta de ERC para desarrollar las competencias fiscales, abrir negociaciones con el Gobierno para gestionar el IRPF, destinar las recaudaciones por el nuevo impuesto estatal a las energéticas y los bancos a las comunidades autónomas, y denunciar la "competencia fiscal agresiva y represiva" de Andalucía y Madrid. Los republicanos se han quedado solos defendiendo esta propuesta, que también reafirmaba el apoyo de la cámara al modelo "progresivo, redistributivo y ambientalmente avanzado de Catalunya". Junts, la CUP y los comuns se han abstenido, mientras que el resto de formaciones han votado en contra. También han pinchado resoluciones de Cs y el PP para bajar el IRPF, y otra de Vox para suprimir todos los impuestos propios de Catalunya.

Presupuestos en octubre, a pesar del anuncio de los comuns

El mismo día que la líder de los comuns, Jéssica Albiach, ha anunciado que su formación congelaba la negociación de los presupuestos del próximo año hasta que se resuelva la crisis abierta entre los socios del Govern, el Parlament también ha aprobado una iniciativa del PSC para reclamar al ejecutivo presentar en octubre las cuentas del año próximo, así como abrir un diálogo con los grupos parlamentarios, en la línea de la reclamación de los socialistas para que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, cuente con ellos, a diferencia de su posicionamiento hasta ahora. La propuesta ha sido aprobada por el PSC, ERC y los comuns, mientras que Junts y la CUP se han abstenido.