La presencia de Elisenda Paluzie a las Naciones Unidas sigue beneficiando la causa catalana. La todavía presidenta del Assemblea Nacional Catalana ha participado este lunes y martes en el Foro Regional Europa y Asia Central 2022 de la ONU, celebrado en Viena, para denunciar los abusos del Estado español contra el pueblo catalán y el movimiento independentista, que en estas últimas semanas se ha concretado con la revelación del escándalo del CatalanGate. Según las informaciones compartidas por el laboratorio de ciberseguridad Citizen Lab, una sesentena de personalidades vinculadas al movimiento independentista habrían sido espiadas durante varios años en pleno auge del procés, previsiblemente por las autoridades españolas y el CNI, aunque estas lo han desmentido hasta ahora.

Paluzie se dirigió a la sala dos veces. En la primera ocasión, lo hizo para exponer cómo el CatalanGate ha afectado a su organización independentista: "Cinco miembros de nuestra organización, yo incluida, han sido víctimas del software espía Pegasus utilizado por las autoridades españolas para espiar masivamente el independentismo catalán". En la segunda ocasión, lo ha hecho para recordar que el Estado ha optado por investigar un movimiento pacífico de la disidencia política. "España, junto con Hungría y Polonia, representan por ahora los únicos casos de espionaje estatal dentro de la Unión Europea, y crean un precedente peligroso no solo para las minorías europeas, sino que también para las minorías nacionales de todo el mundo", ha alertado.

Más allá, la presidenta de la Asamblea también ha recordado que el artículo 2 de la Declaración de 1992 sobre los derechos de las personas pertenecientes a minorías nacionales reconoce que "todos los estados tienen que tomar medidas para garantizar que las personas pertenecientes a minorías nacionales puedan ejercer plena y eficazmente todos sus derechos humanos fundamentales sin discriminación ni desigualdad". Además, ha pedido a las autoridades de la ONU que desarrollen un papel más activo para proteger los derechos civiles y políticos de la minoría nacional catalana. Otros secretarios nacionales de la Asamblea también han intervenido para denunciar la persecución de más de 3.300 activistas y representantes pacíficos catalanes por parte de las autoridades españolas.

Reacción del Estado

Las contundentes declaraciones de Paluzie no han quedado sin respuesta. Durante el acto, se ha levantado la embajadora española en Austria, Cristina Jiménez de Muñana, para interpelar a la presidenta de la ANC y afirmar que "los líderes políticos catalanes fueron juzgados y encarcelados en aplicación de la ley española, porque infringieron la legislación". La respuesta de Paluzie ha sido inmediata, que ha rebatido que "cuando el año 2019 el Grupo de Trabajo de Detenciones Arbitrarias de la ONU pidió la liberación inmediata de los presos políticos catalanes, remarcó que la organización de un referéndum de autodeterminación no es delito según la legislación española, y que su encarcelamiento implicaba una vulneración de sus derechos". Además, también ha denunciado las declaraciones de la ministra de Defensa, Margarita Robles, que justificó el espionaje al independentismo la semana pasada.