El Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 llevará el próximo martes al Consejo de Ministros el anteproyecto de la Ley de Familias, que contempla un permiso retribuido de cinco días al año para poder atender un familiar hasta segundo grado o a alguien con quien se convive. Aunque el ministerio dirigido por Ione Belarra quería que este permiso llegara a siete días anuales y con la opción de ampliarlos a nueve si el solicitante necesitaba desplazarse a otra comunidad autónoma para hacerse cargo del familiar, el permiso ha quedado en cinco días, hecho que ha permitido encontrar el equilibrio en las negociaciones entre Derechos Sociales y Hacienda.

Las otras novedades que incorpora la Ley de Familias son la ampliación de la renta mensual de 100 euros al mes para niños de 0 a 3 años. Hasta ahora, solo se podían acoger las mujeres trabajadoras. Ahora, también la podrán recibir las mujeres que se encuentran en paro. Al mismo tiempo, los derechos de las familias monomarentales con dos hijos, las familias con dos hijos donde uno de los ascendientes o descendientes tenga discapacidad y también los de aquellas integradas por dos hijos donde la mujer haya sido víctima de violencia de género serán los mismos que los de las familias numerosas. Paralelamente, la norma contemplará un nuevo permiso parental de ocho semanas, no retribuido, que se podrá hacer de manera continua o bien discontinua hasta que el hijo o hija llegue a los 8 años. En este contexto, el Ministerio de Derechos Sociales también quería ampliar a seis meses los permisos de paternidad y maternidad, pero esta propuesta no ha salido bien y seguirán en 16 semanas.

Lo que dice el acuerdo del Gobierno de coalición PSOE-Unidas Podemos sobre las familias

Lo que recoge el acuerdo de coalición que suscribieron el PSOE y Unidas Podemos es que se comprometían a "elaborar una ley que responda y proteja en las diferentes estructuras familiares". "Se protegerá a las familias monomarentales y monoparentales (encabezadas en más de un 82% por mujeres), las familias numerosas, las de partes múltiples y las familias acogedoras, adecuando las ayudas y prestaciones a la situación de necesidad según el tamaño, características y rentas familiares, subrayaban en el texto del pacto. Todavía sobre esta cuestión, añadían que garantizarían "la protección efectiva de las diferentes realidades familiares escogidas con libertad, con medidas de apoyo a la adopción a familias LGTBI, reconocimiento de la filiación de las parejas de mujeres lesbianas y protección jurídica de las nuevas formas de convivencia estables sin ser pareja".