Nueva crisis entre los socios del Gobierno, el PSOE y Unidas Podemos. El cambio de retórica del presidente español, Pedro Sánchez, sobre la reforma laboral no ha sido nada bien recibido por sus socios de gobierno. Sánchez ha pasado de asegurar una reforma laboral que pondría "punto final" a la legislación de 2012 a anunciar que la reforma solo afectará "a algunas cosas" del marco laboral que creó el Partido Popular.

Sánchez explicó ayer, después de asistir a la cumbre del G20, que se tienen que reconstruir algunas de las cosas que se hicieron mal en 2012", pero que igualmente "se tiene que mirar hacia adelante". Estas palabras chocan frontalmente con las promesas que exclamó en el Congreso del PSOE de hace menos de un mes, donde prometió que pondría "punto final" a la legislación del 2012.

Los socios estallan

Sus socios de gobierno han reaccionado a las palabras del presidente español. El primero que lo hizo fue el líder de Más País, Íñigo Errejón, que criticó que Sánchez ahora "evite hablar de derogación" de la reforma laboral y recriminó que "no puede quedarse a medio camino".

Errejón TUIT

El siguiente fue el portavoz de los socios de Sánchez, Pablo Echenique, que tuiteó: "Pacta sunt servanda" ("el pactado obliga"), acompañado del acuerdo de coalición en lo que remarca el punto 1.3 del pacto: "Derogaremos la reforma laboral".

Echenique TUIT

El partido que recientemente ha descartado enmendar los presupuestos del Estado EH Bildu también ha criticado las palabras de Sánchez. La portavoz de la formación independentista vasca, Mertxe Aizpurua, ha criticado al presidente socialista que pase de hablar de "derogación total" a decir que quiere "reconstruir algunas cosas". Aizpurua ha avisado de que "es hora de abandonar los eufemismos y las ambigüedades y derogar la reforma laboral como se comprometió el gobierno". También ha recordado que "toca cumplir con las demandas de la mayoría social". De hecho, Bildu votó a favor de la prórroga del estado de alarma a cambio de este compromiso.

Aizpurua TUIT

Aislamiento internacional

A todo eso se tiene que añadir que Sánchez reconoció el aislamiento internacional y aseguró que no tienen prevista ninguna reunión bilateral con el presidente de los Estados Unidos de América, Joe Biden: "No lo tenemos en la agenda".

Sánchez valoró la cortísima conversación con Biden como un encuentro "amistoso y cordial" y consideró a su homólogo americano como un "aliado". A pesar de que el presidente de Francia, Emmanuel Macron, entre otros, sí que se ha reunido con Biden, el presidente socialista ha esperado ser convocado a "futuras reuniones para tratar temas más precisos".

Imagen principal: Yolanda Díaz y Pedro Sánchez Europa Press