La consellera d'Agricultura Meritxell Serret, destituida para el 155, defiende que el próximo presidente de la Generalitat tiene que ser "alguien que realmente pueda ejercer". En una entrevista con la ACN desde Bruselas, Serret asegura que después del 21-D "Catalunya necesitará un gobierno fuerte para hacer frente a las amenazas y a los envites que puedan seguir viniendo del Estado español", que esté "cohesionado" y tenga "las ideas claras de hacia dónde tiene que ir el país".

Según Serret, Carles Puigdemont "no necesariamente" tiene que ser el president después de los comicios. "Tenemos que poder investir a la persona más capacitada y que pueda salir adelante un gobierno fuerte y cohesionado. ¿Quién será, al final? Ojalá pueda ser la persona de la lista más votada. En este caso, si es ERC, ojalá pueda ser Junqueras porque querrá decir que ya ha salido fuera de prisión", indica.

Serret explica que le gustaría "mucho" volver a Catalunya, tanto si sale escogida diputada por Lleida como si no. Con todo, admite que se lo pensará "dos veces" si el retorno implica su ingreso en prisión. Según ella, estar en Bruselas es también una estrategia política para "poner en evidencia" el Estado y forzar que "se compare y que se internacionalice lo que hacen el gobierno español y la justicia española con lo que hace Bélgica. "Continuar aquí tiene un sentido: si después de todo lo que hemos hecho hasta ahora volvemos a Catalunya y nos ponen en prisión sería darlo por perdido", añade.

Para Serret, los consellers que están en la capital europea tienen que seguir allí si esto permite trabajar para acabar "con la represión". Serret destaca, sin embargo, que el posible retorno de los que están en Bruselas se tendrá que discutir después de los comicios y que ahora hay "que "ganar". "Tenemos claro que lo que se ha hecho a Catalunya es una injusticia, este 155 va contra el estado de derecho, contra los derechos fundamentales de las personas," dice.

"Tenemos que ganar para sacar de la prisión a Oriol, Quim y los Jordis, que todo el mundo vote por las opciones que lo único que queremos es devolver la normalidad", añade. Además, dice, una victoria independentista también ayudará a los que están fuera: "Los que estamos aquí en el exilio también necesitamos que a nivel europeo, a nivel catalán y a nivel español quede clarísimo que la fuerza más votada es una fuerza independentista".

Según Serret, "no es una contradicción" que los consellers y el president en Bruselas sean considerados como miembros "del gobierno que fue sacado de manera ilegal" del poder, con la creación de un nuevo ejecutivo en Catalunya. "El próximo president de la Generalitat tiene que ser la persona que pueda ejercer de president de la Generalitat, lo tenemos claro", añade. "Es evidente que se tiene que investir a un presidente o presidenta que pueda ejercer realmente como presidente o presidenta y salir adelante un gobierno fuerte, cohesionado y con las ideas claras sobre hacia dónde tiene que ir el país", insiste.

Serret no descarta que la justicia española emita de nuevo una euroorden contra ellos porque no hacerlo dejaría "todavía más en evidencia que lo que están haciendo es un contra-sentido". No puede ser que nos dejen de perseguir a nosotros y que mantengan a personas como Oriol, Quim y los Jordis en prisión. Por eso pensamos que es muy probable que vuelvan a emitir otra euroorden", admite.

Para la consellera destituida, los que están en Bruselas tienen que trabajar para que "lo que está pasando en Catalunya no quede impune". Serret dice que "en ningún caso" fue un error declarar la independencia del 27-O teniendo en cuenta la represión posterior. "No creo que, en ningún caso, fuera un error. Al contrario, creo que con el tiempo veremos que era necesario tomar aquella decisión", indica.