"Barcelona necesita a un alcalde que no dude, que no se refugie en ninguna ambigüedad, que abra las escuelas el 1 de octubre". Con este fuego contra la alcaldesa Ada Colau ha abierto la campaña de las elecciones municipales el republicano Ernest Maragall. El alcaldable de ERC, que ha celebrado el pistoletazo de salida de la campaña en la playa del Bogatell, se ha presentado como el único alcalde independentista posible de la ciudad, apelando así al llamado voto útil, y ha situado la batalla del 26-M entre dos únicas opciones: o la ambigüedad y "el sin proyecto de Colau" o el "proyecto Maragall". "Los únicos que podemos ganar Colau somos nosotros", ha insistido.
El candidato republicano ha salido en un escenario idílico, delante de mar barcelonés y mientras se ponía el sol, acompañado de su número dos, Elisenda Alamany, que también ha cargado duramente contra la candidata de los comunes, su anterior partido. Alamany ha reprochado a Colau no haber estado a la altura del "momento excepcional" y ha critica que no quiera hablar de Catalunya y que se aísle del 1-O y la represión. "Queremos hablar de Barcelona pero también de todo lo que es, no se puede hablar de Barcelona sin Catalunya", ha defendido, acusando también que Colau sólo gobernar con "buenas intenciones" y de ser un projecte unipersonal.
ERC, que ganó las elecciones españolas en la capital catalana al PSC por un estrecho margen, quiere revalidar la victoria. Las encuestas, sin embargo, no le auguran un camino fácil. La última, el CIS publicado este jueves, sitúa Maragall y Colau en un empate técnico. Los próximos quince días serán claves por saber quien se hace con la alcaldía de la ciudad.
Segunda vuelta, también en Europa
Más allá de Barcelona, sin embargo, los republicanos también se proponen ganar en la mayoría de municipios catalanes y en Europa. Por eso, en el acto de apertura, ante unas trescientas personas, también ha intervenido la número dos de la candidatura europea, Diana Riba, que ha pedido salir a ganar y ha recordado a "todos aquellos que nos quieran vencidos" que "no han podido, no podan y no podrán". "Si Junqueras gana, se pone en entredicho la democracia española, pondremos España frente a un espejo" porque se visualizará todavía más que "hay presos políticos", ha añadido.
Horas antes también el número uno de la candidatura y presidente del partido, Oriol Junqueras, había enviado una carta a militantes y simpatizantes para pedir una doble victoria a Barcelona y a Europa para revalidar el proyecto independentista. En la carta, Junqueras defiende que hay que ganar en Barcelona porque "el país necesita que la capital sea republicana para continuar el camino hacia la independencia" y también a las europeas para "volver a derrotar la represión con toda Europa como testigo".
Junqueras, como en la anterior campaña del 28-A, ha pedido participar en varios actos y entrevistas desde la prisión de Soto del Real. De momento, pero, el árbitro electoral le ha vetado la participación en tres actos entre este viernes y el fin de semana, a pesar de que sí que le ha autorizado realizar tres entrevistas a mediados de comunicación diferentes.
Victoria municipalista
Finalmente, también ha intervenido el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, que ha querido recordar que su formación es la que más candidaturas municipalistas presenta, 807, y ha asegurado que esperan ser también los que consigan más alcaldías, título que en estos momentos tienen el espacio postconvergent. Así, el vicepresidente y presidente adjunto del partido ha pedido volver a teñir de amarillo el mapa de Catalunya, como pasó el 28 de abril, cuando ERC ganó las elecciones al Congreso con un resultado histórico de 15 diputados. Los republicanos presentan, pues, el 26-M como una auténtica segunda vuelta.