La dimisión del exconseller de Economía Jaume Giró como diputado en el Parlament y vocal de Junts en la ejecutiva del partido presidida por Carles Puigdemont ha causado malestar, alboroto y desazón entre una parte de las filas juntaires (sobre todo, de cargos municipales). Sin embargo, los juntaires tienen que reaccionar rápidamente y ya tienen sustituto en el grupo parlamentario. Se trata de Laura Martínez Portell, exalcaldesa de Vilassar de Mar, que era el siguiente a la lista en la demarcación de Barcelona (número 20). Martínez fue alcalde de Vilassar de Mar entre el 2023 y el pasado marzo del 2025, cuando la oposición de izquierdas se puso de acuerdo para desbancarla con Babor (la marca local de la CUP y los Comuns), ERC y el PSC. Precisamente, eso provocó la expulsión de los dos diputados socialistas del partido, ya que esta apuesta tenía la oposición de la dirección nacional socialista.
Martínez Portell también fue vicepresidenta de la Diputación de Barcelona el año 2019, así como presidenta del Instituto Català de les Dones. Abogada de profesión, es una persona próxima al secretario general juntaire, Jordi Turull. De hecho, durante las últimas elecciones de Junts en las ejecutivas comarcales, Martínez formó parte de la candidatura próxima a Turull, encabezada por Lily Fuentes, y que perdió contra un clásico de la comarca: Carles Bosch. De hecho, es el único presidente comarcal en el país que no es próximo al secretario general juntaire.
La baja de Giró causa alboroto interno
De esta forma, Jaume Giró ya tiene sustituto en el Parlament de Catalunya, después de dejar el escaño y "la política activa" porque las orientaciones actuales del partido no coinciden en su forma en entender la situación actual que vive Catalunya ni con la política que cree que conviene y necesita el país. "Sin embargo, hoy tengo la sensación de que mi aportación no se corresponde plenamente con la exigencia y la implicación que yo mismo me impongo a la vida", dijo Giró, que cree que la política es "demasiado a menudo excesivamente táctica" y "se priorizan los intereses de partido por encima del país". De hecho, eso fue respondido para el portavoz de Junts, Josep Rius, este lunes por la mañana en una rueda de prensa en la sede del partido, desde donde dijo: "La gente de Junts siempre ponemos el país ante el partido y el partido ante las ambiciones personales". El exconseller Miquel Buch, que dejó la militancia juntaire recientemente, también criticó el partido encabezado por Puigdemont este lunes y aseguró que Junts "cada vez tiene menos fuerza" y que ni sus propuestas ni sus liderazgos "responden a las necesidades de la sociedad catalana actual".