El exconseller Jaume Giró renunciará en las próximas horas a su acta de diputado en el Parlament y a los cargos que ocupa en la ejecutiva nacional de Junts. Las razones de esta decisión, que califica de "difícil, pero serena y madurada", son las discrepancias con el partido, según explica él mismo a través de un contundente comunicado que ha hecho público a primera hora de este jueves y donde detalla que ayer ya transmitió su determinación al presidente del partido, Carles Puigdemont, y al secretario general, Jordi Turull.
"He tomado la decisión de dejar el escaño y la política activa porque considero que en este momento no estoy en condiciones de dar al partido lo que espera de mí, ni tampoco las orientaciones actuales del partido coinciden con mi manera de entender la situación actual que vive Catalunya ni con la política que creo que conviene y necesita el país", asegura en el comunicado, donde explica que su decisión nace de un sentimiento personal que no puede ignorar.
Conselleria inesperada
Giró, que entre otras responsabilidades ocupó la dirección general de la Fundación Bancaria La Caixa entre el 2014 y en el 2019, entró en política en mayo del 2021, cuando asumió a propuesta del entonces secretario general de Junts, Jordi Sánchez, la Conselleria de Economía del Govern presidido por Pere Aragonès. Dirigió este departamento hasta octubre del 2022, cuando Junts abandonó el ejecutivo por discrepancias con ERC. Entonces Giró ya fue una de las voces que se expresó contraria a aquella salida. Desde las elecciones del 2024 es diputado en el Parlament, donde preside la comisión de Empresa, además de formar parte de la ejecutiva de Junts desde el congreso del 2022, cuando se convirtió en el vocal más votado de la dirección.
En su comunicado, recuerda que llegó a la primera línea política "de manera inesperada", dado que a pesar de haber mantenido siempre "un compromiso profundo con el país", nunca se había planteado expresarlo desde la militancia ni desde la responsabilidad de gobierno.
"Renuncié sin dudarlo a mi trayectoria previa y a mi despacho profesional para poder dedicarme con plena libertad y sin interferencias a servir al país. Trabajar por Catalunya ha sido, sin duda, un honor y un privilegio", explica en el texto dónde, no obstante, no esconde el desencanto: "Sin embargo, hoy tengo la sensación de que mi aportación no se corresponde plenamente con la exigencia y la implicación que yo mismo me impongo en la vida".
Calentar la silla
En opinión de Giró, Catalunya vive por varias razones en una encrucijada decisiva, mientras que "la política es demasiado a menudo excesivamente táctica". "Se priorizan los intereses de partido por encima de los de país, y eso dificulta la colaboración entre las fuerzas principales y, de rebote, el bienestar y el progreso del país", lamenta.
Asegura que marcha de sus cargos con la tranquilidad de saber que actúa siguiendo solo sus convicciones y con la esperanza de que otros puedan aportar la energía y las ideas que el momento requiere. "Yo no he estado nunca para calentar la silla. Y tengo en estos momentos de mi vida el privilegio de poder seguir siendo fiel a estos principios", remacha.
Vocación de servicio intacta
A pesar de confesar que ignora si en el futuro tendrá nuevas oportunidades para renovar su compromiso con el país, asegura que su vocación de servicio sigue intacta y que se siente "profundamente identificado con los valores, la cultura, el talante y la manera de hacer que han construido los fundamentos de nuestra nación".
Giró concluye el comunicado con un agradecimiento a sus compañeros y a los trabajadores del Parlament, con una referencia especial a los diputados de su grupo, a dirigentes y militantes del partido, responsables municipales, y a los miembros de las sectoriales y territoriales de Junts, por haberle permitido vivir una etapa "intensa y enriquecedora" de su trayectoria.