Malestar dentro de una de las formaciones que forman parte de la candidatura de la CUP por la posición de sus representantes políticos en relación a la guerra entre Rusia y Ucrania. Es Lluita Internacionalista, que tan pronto como estalló el conflicto reclamó mantener un debate interno para fijar la posición, ya que consideran que se tiene que denunciar la invasión rusa sin dar lugar a confusiones. Es así como la formación pidió abordarlo a la Coordinadora Abierta Parlamentaria (COP) de los anticapitalistas del mes de marzo, pero se desestimó, aseguran. Será este sábado finalmente cuando los sectores de la CUP tendrán este debate, según ha adelantado el diario Ara y ha confirmado Lluita Internacionalista a ElNacional.cat.

¿Cuál está siendo la posición pública de la CUP con respecto al conflicto? Tan pronto como estalló la guerra la presidenta del Parlament, Laura Borràs, convocó una Junta de Portavoces que elaboró una declaración para condenar las acciones bélicas soltadas por la Federación Rusa, una agresión que tildaron de "violación flagrante del derecho internacional". La CUP no se sumó a la declaración y un día después hizo un comunicado donde cargó contra la OTAN y la Unión Europea por el conflicto, en un escrito que titularon "No a la guerra, no a la OTAN". Unas semanas después el Parlament recibió con una ovación al cónsul de Ucrania, y de nuevo la CUP se desmarcó: los cupaires fueron los únicos que no aplaudieron y mostraron carteles con el símbolo de la plataforma 'Aturem la Guerra'. Una estampa similar se ha vuelto a producir esta semana, ahora en el Congreso de los Diputados: el miércoles intervino al presidente ucraniano Volodímir Zelenski, y la CUP tampoco aplaudió su intervención.

Posicionamientos sin debate previo

Son todas estas posiciones que han generado malestar entre las filas de Lluita Internacionalista, que el sábado trasladará su posicionamiento a la Coordinadora Abierta de la CUP. En un documento al cual ha tenido acceso ElNacional.cat, este sector denuncia que los posicionamientos públicos de los diputados cupaires no han estado "en ningún caso" debatidos en el seno de la candidatura, y consideran que este posicionamiento no los representa. Es así como condenan que la CUP no haya hecho una "denuncia de la invasión rusa", ni la exigencia de la retirada de Putin de Ucrania: "Para nosotros es una guerra injustificable de carácter imperialista ruso, contra un país más débil. La retirada de las tropas rusas tendría que ser el primer elemento de cualquier planteamiento", apunta Lluita Internacionalista.

También critican la posición de la CUP ante el cónsul ucraniano, cuando en lugar de aplaudirlo en el Parlament, mostraron el símbolo de 'no a la guerra': "¿Cómo pueden pedirle paz a alguien del pueblo que sufre las bombas?", se preguntan desde Lluita Internacionalista, que consideran que esta exigencia de 'no a la guerra' allana el camino a la ocupación de Putin: "Según la CUP, Ucrania no puede armarse, pero llenaban carteles de kurdas armadas contra los yanquis. Para nosotros no hay categorías de pueblos. Todo pueblo tiene derecho a defenderse", añaden.

En su posicionamiento Lluita Internacionalista quiere dejar claro que no dan "ningún apoyo político" al gobierno de Zelenski por ser neoliberal y querer entrar en la OTAN y la UE, pero sí que dan apoyo a la resistencia para detener la invasión rusa. Además, consideran que ningún diputado de la CUP "desde la distancia" tiene derecho a cuestionar el armamento de Ucrania: "Nuestra posición, contra la reflejada en discursos y actitudes de los diputados de la CUP que no nos representan, pasa por exigir fuera de las tropas rusas", añaden.

Aplauso acrítico

Después de que el martes los diputados de la CUP no aplaudieran Zelenski, el diputado anticapitalista en el Congreso Albert Botran ha explicado que su posicionamiento radica en no confundirse "en un aplauso acrítico". En un escrito en eldiario.es Botran ha alertado de que "el estado ucraniano también ha cometido abusos en los últimos años y durante la guerra". También en una entrevista en Planta Baixa el diputado ha reconocido que el agresor es Putin: "Pero no queríamos fundirnos en un aplauso acrítico que diera apoyo incondicional a Zelenski, con quien no compartimos muchos de sus posicionamientos políticos," ha remachado.