La incertidumbre que cierne sobre las mentes de la ciudadanía desde que el viernes el Parlament proclamó la República catalana necesita una justificación por parte del Govern —aunque ayer saliera el president a reafirmarse con la declaración de independencia— para que los catalanes sigan confiando en los pasos que vendrán y, precisamente por eso y después que diferentes personalidades como la periodista Pilar Rahola manifestara sus dudas como, por ejemplo, por qué la promulgación de la República no aparece al Diario Oficial de la Generalitat, el vicepresident, Oriol Junqueras, ha escrito hoy un artículo en El Punt-Avui para clarificar algunas cuestiones y explicar "el camino que nos queda por recorrer".

De hecho, así se titula su escrito, que pretende calmar los ánimos de los catalanes más preocupados, pero también ser realista, y lo hace bajo la convicción que "los próximos días tendremos que tomar decisiones y no siempre serán fáciles de entender". Los de Carles Puigdemont necesitan "una estrategia compartida", sustenta Junqueras en una clara alusión a las palabras del líder de Podem, Albano-Dante Fachin, que rechazó este sábado presentarse a unas elecciones si no hay una "estrategia conjunta".

El vicepresident ha subrayado en este sentido que "es imprescindible tejer sólidas alianzas con todos aquellos actores sociales y económicos que tienen la decidida voluntad de construir un verdadero Estado al servicio de la ciudadanía", mientras ha recordado que "ya hemos iniciado el camino y vamos constatando que nos pondrán todo tipo de trabas, que nos lo pondrán mucho y muy difícil, que no escatimarán recursos para hacernos desfallecer, que quizás habrá momentos de incertidumbres, de dudas o de contradicciones entre aquello que queremos y el camino que escogemos en cada fase para llegar".

Mantener la firmeza

Ahora bien. Aunque "no será fácil", Junqueras quiere dejar bien claro que "no tenemos ninguna otra opción que seguir adelante, que acumular fuerzas, que seguir cargándonos de razones, de compartir desazones y alegrías, fracasos y esperanzas, de saber encajar las veces para volver a alzarnos, sin renunciar nunca a las urnas para validar la República".

La fuerza del artículo 155 de la Constitución tiene que servir, a opinión suya, para "perseverar y al mismo tiempo a ser más fuertes para acabar triunfando", pero "hay que hacerlo", como siempre, "desde el civismo y la actitud pacífica" porque, según ha asegurado el vicepresident, "el coraje que ha demostrado este país estos días es tan aleccionador y tiene tanta fuerza que tarde o temprano acabará traduciéndose en la consolidación de la República catalana llena y verdaderamente justa y democrática".

"Justa y democrática" a diferencia de lo que ha demostrado el Estado español estos últimos meses cuando se ha visto que "nada del que podamos decidir, por justo y deseado que sea, se puede hacer si el gobierno del PP, o del PSOE, o de todos ellos, no lo autoriza". Todo eso evidencia "estamos sufriendo un proceso de involución del autogobierno constante y sostenido, de hace años" y, además, "una toma de decisiones del gobierno español con voluntad manifiesta de perjudicar a la sociedad catalana". El Corredor Mediterráneo es sólo una muestra del trato de los de Rajoy que "lamina" casi todo lo que tiene que ver con Catalunya.

Por tierra, mar y aire

Junqueras recuerda que el Govern ha intentado dialogar con los de Rajoy "por tierra, mar y aire", pero se lamenta de que nunca han correspondido y, lo que es más, que "siempre nos hemos encontrado el mismo muro de incomprensión" y "el mismo rechazo", hecho que sólo demuestra que "el gobierno español ha impuesto siempre a Catalunya es de subordinación arbitraria y caprichosa, de sometimiento."

Justamente en esta línea, el vicepresident pone encima de la mesa que la actitud del ejecutivo del PP con Catalunya no ha sido la deseada por la sociedad catalana, sino al contrario, "nunca nos han intentado seducir sino que han querido resolver el malestar creciente a Catalunya con arrogancia y visceralidad".

Después de dar un repaso por todos los portazos que el gobierno español ha ido protagonizando contra Catalunya, el también conseller de Economia ha admitido que "la República catalana ha nacido, no con la fortaleza que querríamos pero sí con la legitimidad de las urnas" y ha asegurado que, sin embargo, continuarán adelante porque, además, ahora "hemos visualizado que la causa de que defendemos tiene poco que ver con banderas y mucho con los derechos sociales y políticos de todos".