La fiscal general del Estado, María José Segarra, ha salido al rescate de los fiscales que están participando en el juicio al procés y ha considerado que la acusación de rebelión a los encausados del juicio del procés tiene "fundamento", después de los interrogatorios de los acusados.

Después de participar en la inauguración de unas jornadas sobre "Igualdad y Justicia", Segarra ha expuesto que la actuación de los fiscales ha estado "absolutamente profesional" tanto en la instrucción como en la vista oral. También ha expresado que en los interrogatorios se ha visto que los acusados cuentan con todas las garantías procesales porque han tenido "la capacidad de desarrollar plenamente su versión de los hechos".

Ha añadido que este miércoles el juicio entra "en una nueva fase" en que la fiscalía desarrollará su prueba a través de las declaraciones de los testimonios, que "tienen obligación de decir verdad y hablar sólo sobre hechos". Ha apuntado que la fiscalía sostiene que existió un delito de rebelión y con esta tesis "trabajará durante todo el juicio".

Hay que recordar que a lo largo de estas primeras semanas de juicio, los fiscales no han interrogado a todos los presos políticos sobre la supuesta violencia vivida en Catalunya, aunque todos están acusados del delito de rebelión, el cual requiere violencia. Además, en varias ocasiones los fiscales se han equivocado a la hora de mencionar hechos y han sido advertidos por el presidente de la sala del Supremo, Manuel Marchena, de querer repetir las preguntas a los acusados con el objetivo de conseguir las respuestas adecuadas a sus intereses de acusación.