El conseller de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia, Alfred Bosch, ha denunciado este martes desde París que el juicio al procés "no ayuda" al "diálogo" y "el entendimiento" ni a encontrar una solución "democrática" para Catalunya, "la única civilizada y razonable".

Desde la delegación del Gobierno en la capital francesa, donde ha inaugurado su reapertura desde el 155, Bosch ha pedido al Gobierno que no se deje llevar "por los cantos de sirena de la ultraderecha". El conseller ha admitido que "nunca se pierde la esperanza" y ha instado a "aquellos que tienen que decidir" a que "sienten la cabeza" y dialoguen "de forma sincera".

Durante su intervención, Bosch ha denunciado también que el juicio en el Supremo es un proceso "político" y ha asegurado que ni el conseller Raül Romeva ni el resto de los líderes juzgados tendrían que estar en el banco de los acusados. Por otro lado, Bosch ha recordado que el procés en Madrid "no puede tener lugar en Alemania o Bélgica" donde los exiliados son ante otros jueces "ciudadanos libres de Europa".

"Hoy es un día triste para Catalunya, para España y para Europa", ha afirmado. A pesar de todo, ha argumentado, el Gobierno seguirá "internacionalizando" todo lo que se hace en Catalunya y hará "todo el posible" para que en todas las capitales del mundo se sepa "la realidad y la verdad de los hechos". "Nosotros no haremos ninguna campaña, lo que haremos es facilitar el trabajo de los informadores y cada uno ya sabrá juzgar", ha añadido criticando la campaña del Gobierno a través de España Global.