Mercè Caso, la jueza decana de Barcelona, avala que el reparto de juez y la asignación del caso contra el procés al juzgado de instrucción número 13 era el correcto. Caso ha dado explicaciones, en una entrevista en TV3, después de que las defensas de los líderes independentistas hayan denunciado que hubo "arbitrariedad" para asignar el caso al juez del 13, "por su ideología, y con garantía que lo podía tramitar de una manera especial que era la que convenía".

La jueza decana ha explicado el funcionamiento de asignación: hasta el 2010 la normativa prohibía que un caso recayera en el juez que está de guardia o en el siguiente al que le toca la guardia (siempre que se habla de un caso que se ha producido en un momento indeterminado, no en las últimas horas). Caso ha matizado que esta normativa se modificó en el 2014 y que, desde entonces, la asignación de juez es 100% aleatoria: "Puede ser que yo esté de guardia en el momento que entra el caso y que el azar haga que me toque a mí".

Por lo tanto, Mercè Caso sustenta que la asignación del caso 1-O "no se ha hecho a dedo" y ha subrayado que "el reparto de casos tiene dos principios fundamentales: que sea equilibrado (que un juzgado no tenga más trabajo que otro) y que sea aleatorio".

Cuando menos, la jueza ha indicado que entiende que "las defensas tienen el derecho legítimo a buscar un camino para conseguir su objetivo, aunque ya veremos qué recorrido puede tener".

Reparto de despachos en Madrid

Finalmente, Mercè Caso ha valorado el cambio de sede a la hora de hacer el reparto de despachos a los nuevos jueces, que se hace hoy, y que hasta ahora se hacía en Barcelona pero este año se ha trasladado a Madrid. Según la magistrada, "la decisión ha sido muy decepcionante" y, en todo caso, "tiene que ser puntual porque la entrega tiene que volver a Barcelona que es donde está la escuela judicial".