El juzgado número 13, que investiga las responsabilidades de los líderes independentistas en la organización del 1-O, ha cometido un error sustancial a la hora de atribuir responsabilidades ―las públicas― al vicepresident, Pere Aragonès, en el escrito que dirigió a la fiscalía del TSJC. Y el fiscal Pedro Ariche no ha tenido inconveniente en dedicarle una colleja en el escrito en que comunica que rechaza investigar al vicepresident por desobediencia.

Según el escrito del magistrado, Aragonès era en el momento en que se preparaba el referéndum secretario de Hisenda, cuando en realidad era secretario de Economia, dado que la responsabilidad de Hacienda estaba en manos de otro de los investigados por aquel juzgado, Lluís Salvadó.

El fiscal señala esta circunstancia en sus diligencias, explica el cargo que le atribuye el magistrado por error y añade que se trata de una "situación que es inexacta, en cuanto que el cargo que ostentaba era el de Secretario de Hacienda."

El escrito que el juez envió a la fiscalía recuerda las agendas Moleskine y el documento Enfocats que se incautó al secretario general de Economia, Josep Maria Jové, y a partir del cual describe la supuesta estructura creada para organizar el referéndum.