El expresidente del PP, José María Aznar, ha asegurado hoy durante su comparecencia ante la comisión de investigación sobre la financiación irregular del PP al Congreso de los Diputados que "no estaba ninguna caja B en el PP" y que nunca cobró un sobresueldo. Aznar ha manifestado que no tiene que pedir disculpas de nada de lo que ha hecho porque él nunca ha sido imputado ni citado a declarar por la financiación ilegal del PP.

"No hay ninguna prueba" que el PP haya recibido financiación ilegal, "es un producto de la imaginación", ha asegurado Aznar. El expresidente popular ha insistido en que la sentencia de la Audiencia Nacional que condenó al PP por beneficiarse a título lucrativo de contratos públicos adjudicados de forma irregular no acredita la existencia de una caja B en el partido mientras él estaba al frente de la formación. Ha asegurado que la condea solo se refiere a dos municipios.

Sobresueldos del PP

Aznar ha afirmado que ni conoce ni contrató a Francisco Correa. No ha querido hablar de los papeles de Bárcenas y ha insistido en que no existe ninguna caja B del PP. Otra cosa, ha dicho, "es que haya personas que hayan actuado fuera de la ley". En relación a los sobresueldos, el expresidente ha aseverado que siempre ajustó las cuentas con Hacienda por sus ingresos cuando era diputado y presidente del partido. "Cuando fui presidente del gobierno, solo cobraba este sueldo", ha afirmado.

Aznar ha contestado en primer lugar a las preguntas del diputado socialista Rafael Simancas, a quien le ha reprochado una vez y otra que es el PSOE el que ha sido condenado por financiación ilegal, y no él. El expresidente ha querido lanzar una vez detrás de otra la sombra de la corrupción a los socialistas. Incluso le ha reprochado la venta de armas en Arabia Saudí y los 320 cargos del PSOE, que según ellos, están siendo investigados por corrupción.

Eduardo Zaplana

El expresidente popular ha mostrado su preocupación por la situación y la salud de Eduardo Zaplana, compañero de partido y de gobierno, que se encuentra en la cárcel de Picassent y está siendo investigado por blanqueo de capitales, soborno, malversación de caudales públicos y tráfico de influencias, entre otros delitos.