La Junta Electoral Central ha recordado a la Generalitat que, como responsable del orden público, "tiene que adoptar las medidas necesarias para garantizar la absoluta neutralidad en los espacios públicos durante las jornadas de reflexión y votación" de este próximo fin de semana. Lo hace después de estimar una denuncia del Partido Popular que quería prohibir los actos convocados por el Tsunami Democràtic durante la jornada de reflexión.

El organismo dice que no es competencia suya prohibir actos, tal como pide el PP, pero pasa la pelota al gobierno catalán. Pone especial énfasis en las "concentraciones o manifestaciones que contengan lemas, símbolos, proclamas, declaraciones o actuaciones en defensa de ideas o propuestas exclusivamente defendidas y representadas por algunas candidaturas".

También aprovecha para recordar que está prohibido realizar ningún acto de propaganda o de campaña electoral en los días de reflexión y votación. Además, también avisa de que el día de las elecciones está prohibido "formar grupos susceptibles de entorpecer, de cualquier manera que sea, el acceso a los locales electorales" e, incluso, "la presencia en sus proximidades de quien puedan dificultar o coaccionar el libre ejercicio del derecho de voto".

En concreto, el PP solicitó en las cuatro juntas electorales provinciales catalanas la disolución de los actos que contengan "lemas, símbolos, proclamas, declaraciones o actuaciones en defensa de las ideas o propuestas exclusivamente defendidas y representadas por algunas candidaturas". También pidió al árbitro electoral que tomara "las medidas necesarias para garantizar la absoluta neutralidad en los espacios públicos durante la jornada de reflexión" y ante la "eventual ocupación" de colegios electorales tanto el sábado como el domingo.