Salvador Illa dimitirá antes de que empiece la campaña de las elecciones catalanas. Así lo ha confirmado el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, en una rueda de prensa celebrada este jueves por la tarde después de que el TSJC haya mantenido provisionalmente los comicios para el próximo 14 de febrero.

Así pues, y si el tribunal no dice lo contrario antes, Illa dejará el cargo de ministro de Sanidad antes del próximo jueves 28 de enero a las 00 h. Sin embargo, Iceta no ha precisado qué día lo hará y si apurará hasta el último momento. Preguntado por qué haría el PSC en caso de que el TSJC suspendiera finalmente las elecciones una vez empezada la campaña, Iceta no ha querido entrar en "especulaciones", pero no ha descartado que Illa pueda volver al Ministerio para seguir con la gestión de la pandemia de la Covid-19.

Leyendo una declaración del partido sobre la resolución provisional del TSJC, Iceta ha asegurado que la democracia española "es sólida y robusta". También ha avisado de que "la seguridad jurídica es imprescindible en un proceso electoral". "Los tribunales son los que velan para que los procedimientos se ajusten a la legalidad vigente", ha dicho respondiendo a las críticas del Govern.

En este sentido, Iceta ha recordado que el PSC "ya advirtió de que el decreto [de aplazamiento de las elecciones] presentaba interrogantes desde el punto de vista jurídico". Iceta también ha exigido al ejecutivo catalán que garantice que "todo el mundo pueda votar con seguridad y los protocolos previstos, es su obligación". Precisamente, esta mañana el vicepresident del Govern en funciones de president, Pere Aragonès, ha acusado al tribunal de "obligar" a los catalanes a escoger entre la salud y el derecho al voto.

Iceta también ha anunciado que el PSC continuará adelante con la campaña y promoverá el voto por correo. Según ha aclarado, parte de la campaña se basará en explicar en todo el territorio cómo funciona esta opción ante la emergencia sanitaria de la Covid-19.

El PSC continúa aislado

A pesar de la decisión del TSJC, el PSC sigue siendo el único partido que defiende abiertamente hacer las elecciones el 14 de febrero. Partidos de la oposición como Ciudadanos y el PP siguen pidiendo al Govern que consulte a la JEC con el fin de presentar las alegaciones ante el tribunal. Los comuns también optan por el aplazamiento electoral y han pedido al TSJC que resuelva cuanto antes. Finalmente, la CUP acusa a los magistrados de no tener en cuenta la salud de la ciudadanía y de estar "politizados".