El Gremi de Restauració de Barcelona cree que la ampliación de los horarios de apertura que entrará en vigor la próxima noche del jueves a viernes –bares y restaurantes pasarán de cerrar a las 0.30 h a hacerlo a las 1.00 h- es "insuficiente" y "llega tarde".

En un comunicado publicado este martes, la asociación asegura que la decisión anunciada por el Govern "no ha sido fruto de un diálogo o un análisis compartido con el sector" y subraya que Catalunya sigue siendo la comunidad "más maltrecha" del Estado. De hecho, el gremio pide que la restauración pueda recuperar su horario ordinario –hasta las tres de la madrugada en fines de semana y vísperas de festivo- a raíz de la evolución de los datos epidemiológicos.

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Por otra parte, la agrupación critica la "incoherencia" de la medida, que también permite a discotecas y salas de baile con espacios al aire libre poder abrir hasta las tres de la madrugada. "Se trata de locales temporalmente reconvertidos en establecimientos de restauración", defiende el gremio. Al mismo tiempo, la asociación cree que tendría "todo el sentido del mundo" ampliar los horarios de la restauración para activar "todos los mecanismos posibles para reducir los botellones".

"A las puertas de una movilización masiva con motivo de la Mercè y coincidiendo con otras celebraciones en Lleida y Tarragona, permitiría que bares y restaurantes absorbieran una parte de la demanda que inevitablemente se producirá", defiende.

El ocio nocturno

La Generalitat anunció este lunes que el ocio nocturno en Catalunya podrá abrir en espacios exteriores hasta las 3 de la madrugada desde la noche de este miércoles al jueves, aunque de momento seguirá cerrado en interiores por la pandemia.

Así lo indicaron la secretaria general de la conselleria de Salut, Meritxell Masó, y el secretario general de Interior de la Generalitat, Oriol Amorós, en declaraciones después de reunirse con representantes del ocio nocturno por la tarde. La medida entrará en vigor justo antes de la celebración de las fiestas de la Mercè, patrona de la ciudad de Barcelona.

La Generalitat lo impulsa al constatar una mejora de la situación epidemiológica en Catalunya, aunque ha dejado claro que se mantiene la obligatoriedad de la mascarilla (siempre que no se consuma) y no se permite el baile.

Después de la reunión con el sector, Masó dijo que también "ha propuesto un horizonte próximo para poder abrir los espacios interiores", con la posibilidad de usar el certificado Covid si la situación epidemiológica lo permite.

También está la posibilidad de que sirva para acreditar que se ha pasado la enfermedad en los últimos meses o presentar una prueba de detección con resultado negativo, pero "se priorizará" el uso del certificado Covid.

En la futura apertura de los espacios interiores se seguirá limitando el aforo y "probablemente" se podrá bailar, ha dicho Masó, aunque de momento estará prohibido en los exteriores.

 

Foto principal: Un restaurante de la Barceloneta / ACN