Sin sorpresas en Barcelona y en Madrid. El Consell Executiu y el Consejo de Ministros han autorizado la creación de la nueva empresa mixta que se encargará de gestionar y operar el servicio de Rodalies de Catalunya. Los detalles se dieron a conocer hace un mes y medio y hoy se ha rubricado el formalismo. El traspaso de Rodalies fue uno de los acuerdos incluidos en el pacto entre ERC y el PSOE a cambio de la investidura de Pedro Sánchez en noviembre de 2023. Como estaba previsto, la nueva sociedad mercantil, con el nombre Rodalies de Catalunya SA, tendrá el domicilio social en Catalunya y contará con un capital inicial de dos millones de euros. ¿Cómo se repartirá el poder? La empresa estará constituida por la Generalitat en un 49,9% y por Renfe Viajeros en un 50,1% y el Consejo de Administración tendrá cuatro miembros propuestos por el Estado y cinco propuestos por el Govern, entre los que se elegirá la presidencia, que tendrá voto de calidad.
🔎 Así será la empresa que gestionará las Rodalies de Catalunya: puntos clave e incógnitas
Fue hace cuatro meses cuando el Ministerio de Transportes acordó con los sindicatos que Rodalies no salga del Grupo Renfe y que la mayoría accionarial de la nueva empresa mixta sea del Estado y no de la Generalitat. Fue la fórmula que encontró el Gobierno, rebajando lo que se había pactado inicialmente con ERC, para que se desconvocara in extremis la huelga que se había impulsado en contra del traspaso de Rodalies. Posteriormente, el PSC y ERC pactaron que la dirección ejecutiva de la nova operadora de Rodalies sea independiente de Renfe.
A partir de aquí, Renfe se encargará de aportar todos los medios necesarios para la prestación del servicio, con la asignación de material, instalaciones, bienes e inmuebles, derechos, obligaciones y relaciones jurídicas. A partir de ahora, el calendario es que la nueva sociedad complete su constitución formal con la inscripción en el Registro Mercantil antes del 31 de diciembre con el objetivo de que en enero de 2026 puedan iniciarse las actividades organizativas y a lo largo del año se complete la operación plena del servicio.
Sílvia Paneque celebra que la Generalitat tendrá un “papel fundamental y central”
Desde Barcelona, la portavoz del Govern y también consellera de Territori, Sílvia Paneque, ha hablado de un acuerdo “histórico” en el despliegue de las competencias ferroviarias de Catalunya, a la vez que sirve para dar “cumplimiento a los compromisos de investidura” al que el PSC llegó con Esquerra Republicana hace un año. Paneque, que se ha mostrado muy satisfecha, ha asegurado que la autorización de este martes es un “paso de forma definitiva para tener la empresa operativa a partir del 1 de enero”, destacando que permitirá que la Generalitat tenga un “papel fundamental y central en la gestión de uno de los servicios públicos y que también tiene que suponer un giro en el modelo de transporte público ferroviario”, el día siguiente que una nueva incidencia dejara sin servicio de trenes todo el país. Según la consellera, una de las prioridades es poder mejorar Rodalies en algunos aspectos claves que ahora mismo levantan más críticas entre los usuarios, como la falta de información cada vez que hay una incidencia en el servicio.
Aunque ERC aceptó que la mayoría accionarial fuera de Renfe para intentar calmar los ánimos de los trabajadores que se pusieron en pie de guerra, los republicanos también han explicado que este es un elemento que deberá cambiar en un plazo máximo dos años. Paneque ha asegurado que si bien los estatutos de la empresa recogen los “pasos a seguir para posibles modificaciones accionariales, no existe un calendario sobre la mesa”. Sin embargo, la consellera ha insistido en que nunca se había dado un “paso tan definitivo respecto a la gestión del servicio” y ha querido elogiar y agradecer el trabajo realizado por los republicanos y su grupo parlamentario “desde la exigencia y el esfuerzo”.
Óscar Puente reivindica un “paso decisivo” para la “gobernanza compartida”
En Madrid, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha destacado que se trata de un “paso decisivo en el desarrollo del modelo de gobernanza compartida” del servicio ferroviario catalán. Y ha relatado los tres principales objetivos de la nueva empresa. Por un lado, una “gestión más próxima al territorio, con capacidad real de decisión desde Catalunya sobre las prioridades del servicio” y con una toma de decisiones queremos “más ágil” y “más próxima al día a día de la explotación del servicio”. En segundo lugar, mantener los “estándares de seguridad y coordinación con el sistema ferroviario estatal aprovechando la experiencia y los recursos del grupo Renfe”. Finalmente, la “protección absoluta de los derechos laborales de los trabajadores”, que van a mantener la aplicación del convenio colectivo del grupo Renfe. Todo ello quiere llevar a una “gobernanza más eficaz”.
“En los próximos dos o tres años, los usuarios notarán una sustancial mejora tanto en la puntualidad como en la calidad y regularidad del servicio”, ha reivindicado Óscar Puente. Asimismo, ha subrayado que la nueva empresa asumirá “progresivamente” la gestión de las estaciones y desarrollará la “identidad propia que refleja su arraigo territorial sin perder la coordinación con el conjunto del sistema”. “Más allá de un logotipo diferente, pensamos que esto es clave porque las estaciones, como punto de entrada al tren, requieren una especial atención y mimo, que será mejor si se refuerza el vínculo entre el operador y las necesidades reales de la ciudadanía”, ha justificado.