El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha exigido al gobierno español que "destense" la situación en Catalunya y ha pedido a la Abogacía del Estado que retire sus acusaciones contra los dirigentes independentistas que se encuentran en la prisión y en el exilio.

El diputado de Unidos Podemos sostiene que el gobierno de Pedro Sánchez tiene margen para hacer que mejoren las cosas y, más allá de lo que pueda hacer la Fiscalía General del Estado, reclama a la Abogacía del Estado que retire sus acusaciones. A su parecer la acusación de rebelión no tiene "ni pies ni cabeza".

Garzón, en una entrevista en RNE, ha calificado de irresponsables el líder de Ciudadanos Albert Rivera y  ala presidenta del partido en Catalunya, Inés Arrimadas, para atizar la tensión con la retirada de lazos amarillos y los ha acusado de "polarizar" la sociedad catalana. El diputado de Unidos Podemos les ha reclamado que no busquen "situaciones que dividan".

Llarena: bocazas

Por otra parte, Garzón ha criticado que el gobierno español pague cerca de 550.000 euros en un despacho de abogados en Bélgica para defender al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena por la demanda civil presentada contra él por Puigdemont y los consellers que están en el país belga.

"Se le pone uno se querella por bocazas y ahora pide el amparo al poder político, este es el problema. Lo que ha hecho al gobierno español es ceder a un chantaje del sector más conservador que vulnera la independencia judicial", ha manifestado Garzón.