El Gobierno "estudiará con profundidad" la propuesta de reformar el delito de malversación. Así se ha pronunciado este lunes el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, que no ha cerrado la puerta a incluir la reforma de este delito a las enmiendas sobre la proposición de ley para derogar la sedición y cambiarla por 'desórdenes públicos agravados'. Después de que el presidente de Esquerra Republicana, Oriol Junqueras, pidiera una reforma también para este delito y que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, confirmara que ERC presentaría esta enmienda en el Congreso, Bolaños se ha limitado a decir que "veremos qué proponen los grupos".

Preguntado sobre esta cuestión en una entrevista en la cadena SER, Bolaños no se ha querido mojar mucho y ha dicho que "a través de un anuncio en una entrevista no tengo suficiente información, yo necesito los papeles". De todos modos, el ministro de la Presidencia ha reiterado que la voluntad del ejecutivo presidido por Pedro Sánchez es el de "construir convivencia en Catalunya y España", y que por eso estará pendiente de "qué propuestas se hacen" en el Congreso de los Diputados.

Bolaños también ha asegurado en esta entrevista que el PSOE en ningún caso ha negociado con Esquerra Republicana la reforma del delito de sedición. Es decir, que ha ido más allá de la idea que la sedición haya servido para seducir a los republicanos de cara a la aprobación de los presupuestos españoles. Lo ha asegurado cuando se le ha preguntado sobre la defensa que hace el PP de haber dejado de negociar con los socialistas la reforma del Consejo General del Poder Judicial: que el PSOE decía unas cosas en privado y otras en público con respecto a la reforma de este delito.

El ministro de la Presidencia ha afirmado que la presentación de la propuesta de ley para derogar el delito y presentar otro no se ha hecho por una negociación con ERC, sino por convencimiento de la Moncloa. Ha añadido que, en su opinión, la sentencia del Tribunal Supremo en el juicio al Procés no merece ninguna "crítica". Porque los jueces, según él, aplicaron las leyes tal como están redactadas. Pero sí que ha dicho que las penas fueron "desproporcionadas", por culpa de las mismas leyes. "Ha habido magistrados que en privado nos han dicho que las penas por el delito de sedición eran desproporcionadas", ha explicado Bolaños.

El presidente Aragonès ha asegurado también este lunes que ahora "toca negociar y seguir batallando porque las cosas no caen del cielo y hemos luchado mucho por la sedición, ahora toca luchar por la utilización perversa de la malversación". Con estas palabras, el dirigente de ERC ha querido explicar que el objetivo es reformar el delito de malversación, por el cual están imputados algunos dirigentes independentistas: "Hemos eliminado la sedición y ahora hay que reformar la malversación, aquello que no era delito el 9-N y ellos consideran que sí que lo era el 1-O, tiene que dejar de ser delito".