Los pactos con el independentismo empiezan a cobrarse víctimas dentro del PSOE. El exministro socialista Javier Sáenz Cosculluela ha anunciado que se da de baja del partido. Además, ha remitido una carta al presidente del gobierno en funciones y líder del partido, Pedro Sánchez, en la que manifiesta su "vergüenza" por los pactos de investidura con grupos como Junts y ERC y lo acusa de propiciar una "decaimiento de la democracia" y de las instituciones españolas. La causa de todo, dice, es haber acordado con los partidos independentistas una ley de amnistía que exoneraría a los líderes del procés. La medida de gracia, afirma Cosculluela, coloca al PSOE "en posición de servidumbre enfrente de un nacionalismo supremacista, reaccionario y desintegrador".

En la carta, quien fuera ministro en gobiernos de Felipe González, se dirige a Sánchez y a los miembros de la Ejecutiva Federal y el Comité Federal del PSOE para compartir su "discrepancia" con los acuerdos que ha alcanzado no solo con Junts y ERC, sino también con Sumar, EH Bildu y el BNG. "La política de pactos que estáis construyendo, y por lo visto consolidando, está afectando gravemente a la convivencia", ha dicho, en referencia a las protestas que se han convocado últimamente en todo el Estado y también delante de la sede madrileña del PSOE, en Ferraz, que han acabado con escenas de violencia. "Estáis combatiendo la posibilidad de llegar a acuerdos con la derecha democrática de España, que representa, os guste o no, a media España".

Cosculluela también critica unos "actos políticos insensatos" que asegura que "ponen en riesgo el modelo de estado de la Constitución". "Rechazáis la posibilidad de acuerdos, pactos y voluntad de entendimiento con la derecha, actitud que nada bueno propicia para nuestro futuro colectivo. Veis el abrazo de un oso en los pactos internos de la derecha y, 'podemizados', no alcanzáis a ver al otro oso que nos está apresando", ha añadido el ejecutivo, que ha llegado a pedir la convocatoria de elecciones para "salir del actual marasmo". Y ha culminado la carta afirmando que, "después de más de 50 años de militancia honorable y digna" pide que la formación socialista no actúe en su nombre. "No me represento más que a mí mismo, ya no soy portavoz de nadie, pero debo deciros que me causáis vergüenza", ha concluido. "Es muy triste para mí".