Estudiantes antifascistas han hecho frente a los partidarios de Vito Quiles que le esperaban en la Universitat Autónoma de Barcelona (UAB), donde el agitador ultra quería celebrar un acto este jueves. Hacia las doce y media del mediodía, Quiles aún no había hecho acto de presencia —pasadas las 13:00 h es cuando han empezado a llegar imágenes de Quiles ya en la Autònoma—, pero los manifestantes no lo han necesitado para plantar cara a sus simpatizantes. Ha sido en la plaza Cívica de la universidad donde un grupo numeroso de manifestantes se han concentrado en contra de la presencia del agitador ultra, frente a un grupo mucho menos numeroso de partidarios del pseudoperiodista. Ambos grupos se han increpado y ha habido lanzamiento de huevos, tomates y otros objetos, momento en el cual los Mossos d'Esquadra han intervenido para separarlos. La policía ha acabado llevando a los antifascistas a un lateral de la plaza —justo delante de la biblioteca de Comunicación—, y se ha llevado fuera de la zona al grupo de simpatizantes del agitador. Las redes sociales se han llenado de imágenes del enfrentamiento.

Finalmente, Vito Quiles ha llegado a la universidad ubicada en Cerdanyola del Vallès hacia las 13:00 horas, cuando se lo ha visto discutiendo con autoridades sobre su presencia allá y los permisos que no tiene para realizar su acto en el centro. "La universidad es un lugar para defender a los jóvenes como esta gente de aquí [en referencia a sus seguidores, que lo han vitoreado al verlo]. Escuchen a los alumnos, que no son solo aquellos mil maleantes que hay allá abajo, es la gente que viene diariamente a estudiar a la universidad. Tenemos la necesidad y la obligación de defender a toda esta gente", ha lanzado el polemista, que ha llegado escoltado. Sus seguidores han denunciado una supuesta censura por parte del rectorado de la UAB.

Sin embargo, la UAB había advertido al agitador ultra que no podía celebrar el acto anunciado para este jueves en el campus de Bellaterra si no contaba con la autorización correspondiente, una autorización que la institución no tenía constancia de que se hubiera solicitado. Fuentes de la universidad insistían en que no les constaba "ninguna petición ni reserva de espacio" y que habían revisado todas las vías posibles para comprobarlo: "Hemos consultado todas las vías por las que se podría haber pedido este permiso o la reserva de algún espacio, y no nos consta en ningún sitio. No tenemos otra información al margen de la que publica en las redes sociales". En una comunicación formal dirigida a Quiles, la universidad le recordó el procedimiento que hay que seguir para realizar actos públicos en el campus: "Si usted no se ha dirigido en ningún momento a los responsables de esta universidad para seguir el procedimiento preceptivo y vinculante para llevar a cabo conferencias, charlas, actos públicos, etc., les pedimos que se abstengan de hacer cualquier actividad en el campus sin autorización explícita". 

En este contexto, desde la universidad han estado pendientes de si llegaba Quiles para comunicarle que no puede hacer ningún acto porque no ha pedido permiso, como ya le comunicaron por correo electrónico. Quien sí había pedido permiso para celebrar un acto —sin concretar— es la entidad españolista S'ha Acabat!, pero finalmente no se le había concedido. ¿Por qué? Según la institución, porque este jueves ya había muchos actos convocados en el campus y no era viable.

El agitador ultra quería iniciar en la UAB el tour España Combativa, una serie de charlas por universidades públicas con las que pretendía "reivindicar la libertad de pensamiento y el pluralismo ideológico" en el ámbito académico. Y lo quería hacer inspirado en "el espíritu de Charlie Kirk", el activista estadounidense de extrema derecha que fue asesinado hace un mes durante un acto en la Universidad de Utah. "Después del asesinato de Charlie Kirk a manos de la izquierda, cobra más sentido que nunca abanderar la libertad donde está más amenazada", dijo. Ahora, dos horas antes de la hora prevista para iniciar el acto, Quiles publicaba el siguiente mensaje en las redes sociales: "Buenos días desde Cataluña. Hoy, por fin, desde que empezó el curso, vamos a conseguir que muchos pisen por primera vez la facultad. (Aunque sea para impedir mi libertad de expresión y no para estudiar, pero es un logro)".