La posibilidad cada vez más real de que Pedro Sánchez conceda un indulto parcial a los presos independentistas catalanes es desde hace unos días el centro de gravedad de la política española. Desde Catalunya, en cambio, Esquerra Republicana se esfuerza en hacer bascular el foco. "Los indultos no son la solución. Hace falta la amnistía". Así lo ha afirmado la portavoz y secretaria general adjunta del partido, Marta Vilalta, que ha pedido al Gobierno de España que se apresure en poner día y hora para volver a reunir la mesa de diálogo al margen del debate de los indultos. Es más, ya adelantan que en el caso de la delegación catalana, intentarán que pueda participar su líder, Oriol Junqueras. "Es innegable que nos gustaría muchísimo que pudiera ir, es evidente".

El argumento de los republicanos es que hay en marcha una "causa general contra el independentismo que afecta prácticamente a 3.000 personas" y que un indulto sólo serviría para aliviar la situación personal de los 9 presos, pero no de los exiliados ni del resto de afectados con procesos judiciales pendientes. Por ello, tal como expresó hace unos días el president de la Generalitat, Pere Aragonès, no se opondrán a la conmutación de la pena, pero seguirán batallando para conseguir convencer al ejecutivo del PSOE y Podemos de que la solución pasa por una amnistía general y el ejercicio del derecho a la autodeterminación.

 

Antes del verano

Con esta idea en la cabeza, desde ERC evitan entrar en el detalle de los indultos, ni discutir si aceptan o no que sean parciales. También esquivan posicionarse en relación a la propuesta de reforma de la sedición, que plantean los comunes para atenuar la pena asociada a este delito. Se trata de una medida que habría que aprobar en el Congreso y, por lo tanto, los republicanos, como Junts y la CUP, tendrán voz y voto. En este sentido, admiten que querrán "ver la letra pequeña", pero que en todo caso, lo que convendría es "derogar el delito". "Tampoco creemos que la reforma del delito de sedición sea la solución porque no acaba ni con la represión ni con la judicialización", ha concluido Vilalta.

De entrada, los de Junqueras ponen todos los huevos en la cesta del diálogo con el Estado y presionan a Pedro Sánchez para que les dé hora. Le reclaman que la negociación entre gobiernos para resolver el conflicto se reanude independientemente del debate sobre los indultos. "No podemos dejar pasar más tiempo. Vamos". Es la posición de ERC, que considera que la parte catalana ya está "en plenas condiciones para poder reanudar el diálogo". Cuanto antes mejor, dicen, a poder ser, "antes del verano".

La semana pasada, la consellera de la Presidència, Laura Vilagrà, compartió que el Govern —o cuando menos la parte de ERC que está en el Govern— detecta un giro "estadista" en la Moncloa encaminado a resolver el conflicto con Catalunya. Preguntada por el origen de esta percepción, Vilalta ha puesto en valor que "el Gobierno PSOE-Podemos ha reconocido que hay un conflicto político", confía en que "se mantengan en aquella posición" y pide "ponerse a trabajar" para reanudar la negociación allí donde se congeló ya hace más de un año. Concretamente, reclaman al Gobierno de España que a la próxima cita vaya con una propuesta alternativa a la independencia.

En la imagen principal, Vilalta en la rueda de prensa de ERC. / Marc Puig