La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha asegurado que está previsto que la mesa de diálogo se vuelva a reunir con el cambio de año. Sin embargo, ha expuesto que todavía no está cerrada la fecha, pero que se mantiene la previsión de principios de año. Plaja ha confiado en que la mesa de diálogo Estat-Generalitat quede al "margen" de las elecciones autonómicas en Castilla y León, convocadas para el 13 de febrero de este 2022. El conseller de Empresa, Roger Torrent, ha añadido que este espacio de negociación está haciendo "trabajos forzosamente discretos" y que no se dará a conocer hasta que haya sitio de encuentro para la próxima reunión.
Plaja ha dicho, en una rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo Ejecutivo, que para el ejecutivo las elecciones de Castilla y León no son un condicionante de nada y que siguen adelante con la previsión de reunir la mesa de diálogo entre ejecutivos catalán y español a principios de este nuevo año.
La portavoz del ejecutivo ha argumentado que el objetivo de la delegación catalana en la mesa de diálogo es "ejercer la autodeterminación y poner fin a la represión a través de la amnistía" y ha advertido que el Gobierno no se quedará de "brazos doblados" en caso de que el proceso de negociación no dé resultados.
Una mesa sin fecha
El presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens, ha apostado para no dejar de calendarizar la mesa de diálogo, pero "sin caer en prisas ni fechas". Asens lo dijo hace unos días en una entrevista a Europa Press, después del balance de Pedro Sánchez, a quien ha avisado que ahora toca "avanzar en la agenda social, territorial y democrática", porque eso no es incompatible con gestionar la crisis social. A pesar de defender la necesidad de no dejar de planificar el proceso negociador, ha defendido que la prioridad actual tanto del gobierno central como de la Generalitat tiene que ser superar la pandemia y consolidar la recuperación económica: "Hace falta no caer en las prisas ni poner fechas, pero tampoco se tiene que olvidar de que hay que programar la mesa de diálogo. Es una carpeta que se tiene que abrir. No sé si este mes o el siguiente, no es una cuestión de una semana o un mes, pero hay que abrir esta carpeta".
Sánchez responde
Cuando se le ha preguntado al presidente español, Pedro Sánchez, para la próxima reunión de la mesa de diálogo, ha enfriado la inminencia, a pesar de las exigencias del presidente Pere Aragonès para que sea a enero. "Es de sentido común. ¿Cuál es ahora la prioridad de la ciudadanía? La superación de la pandemia, protegernos de la variante ómicron, consolidar la recuperación, la gestión de los fondos," ha respondido Sánchez. Y ha remachado: "Es lógico que ahora mismo las prioridades tanto de la Generalitat como del Gobierno de España sean otras en aquello urgente. Por lo tanto, ya les diremos cuándo se reunirá. Pero que se reunirá, seguro". Ha concluido pidiendo "unas semanas" de margen.
También ha entrado en el fondo de la cuestión del mensaje de Aragonès: las expectativas de la mesa de diálogo. "Es evidente que todos deseemos resultados tangibles, pero probablemente discrepamos sobre qué significan estos resultados tangibles", ha asegurado Sánchez. En este sentido, ha reiterado su posición: "Nosotros defendemos que tenemos que superar el proceso, que tenemos que dejar de tener dos bloques de la sociedad separados". Dicho esto, ha insistido en que no renuncian al diálogo, porque "será bueno para la convivencia y la convivencia de una sociedad que ha vivido fracturada y enfrentada" durante los últimos años.
Imagen principal: Última mesa|tabla de diálogo - EFE