La decisión del Tribunal Constitucional alemán de cuestionar la compra de deuda por parte del Banco Central Europeo a países que necesiten fuertes inyecciones de capital y no tengan fácil su devolución, ha provocado nervios en Francia, y por supuesto en España e Italia. El Constitucional alemán podría evitar que el Bundesbank participara en el futuro en estas operaciones.

El diario Le Monde, bien conectado con el deep state francés y el rotativo francés con más presencia internacional, ha reaccionado hoy con un contundente editorial que lanza el grito de alarma. Directamente ve peligrar la UE, al menos tal como se la veía hasta ahora. "La sentencia del Tribunal Constitucional alemán del martes 5 de mayo pone en duda tanto la independencia del Banco Central Europeo como la preeminencia del Tribunal de Justicia de la UE", concluye el rotativo francés.

La crisis del coronavirus ha hecho surgir el fuerte malestar de los países del norte por la política de cooperación con el sur, que consideran que se dedica a países que después malgastan las ayudas, y la editorial de Le Monde certifica que se va hacia una crisis política importante.

"Un ultimátum a Europa. Es difícil ver de otra manera la desagradable sentencia que el Tribunal Constitucional alemán dictó el martes, 5 de mayo. Más allá de un ataque a la política monetaria en la zona euro, la decisión de los jueces de Karlsruhe pone en duda la piedra clave de la Unión Europea que es su Tribunal de Justicia (CJEU) de Luxemburgo, garante supremo de aplicación uniforme del derecho europeo en todos los estados miembros. Es decir, la Unión misma", señala el diario sin ambages.

El rotativo asegura que desde hace años existe un enfrentamiento entre el TC alemán y el Tribunal de Justicia de la UE - "entre los jueces de Karlsruhe y de Luxemburgo" - sobre interpretaciones comunitarias. Reconoce que el TC alemán se siente defensor de los ahorradores alemanes que se consideran dañados por las tasas bajas del Banco Central Europeo, y admite que eso arranca de la voluntad de crear en 1951 un organismo fuerte que evitara los problemas que tuvo la República de Weimar para defenderse del nazismo.

Pero insiste en que el TC alemán ha hecho ahora un "ataque brutal" en un momento en que se está hablando de que el Banco Central Europeo invertirá 750.000 millones de euros en recompra de deuda.

La crisis del coronavirus está agravando la división entre el norte y el sur de Europa, y Francia intenta desesperadamente que Alemania no se alinee definitivamente con Holanda y los otros países partidarios del rigor en el gasto. "La crisis causada por el Covid, de la que ningún gobierno europeo tiene la culpa, está ensanchando la brecha que existe entre el norte y el sur del continente. La amenaza que tiene la UE de la peor recesión de su historia, exige una sólida política de solidaridad financiera. Alemania, que se beneficia mucho de la UE y del euro, no puede evitarlo. En ausencia de una política europea real, la confianza en el euro sólo se puede basar en el respeto por parte de los Estados de las reglas e instituciones que se han dado juntos", intenta argumentar el diario francés.