La decisión del juez Pablo Llarena de exonerar al presidente de la Generalitat en el exilio, Carles Puigdemont, del delito de sedición ha encendido los ánimos del PP. Según los populares, no acusarlo ahora del delito de desórdenes públicos agravados (el tipo penal que sustituye, en principio, la sedición en el nuevo Código Penal) significa poner una "alfombra roja" al exlíder de Junts per Catalunya para que vuelva al estado español y pueda ser juzgado por la justicia española.
El coordinador general del PP, Elías Bendodo, ha hecho este jueves una rueda de prensa en la sede del partido para hacer un repaso de la actualidad política, y no ha podido evitar pronunciarse sobre la noticia del día: Pablo Llarena y Carles Puigdemont. El también director de campaña de los populares ha cargado contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y ha tirado de ironía asegurando que el jefe del ejecutivo "cumple su promesa" de entregar a Puigdemont a la justicia española, pero "lo hace con una alfombra roja". Así, Bendodo ha opinado que la reforma del Código Penal que el PSOE pactó con ERC y Unidas Podemos es un "auténtico disparate", ya que "ahora permite que Marta Rovira vuelva al Estado".
Un rato antes se ha pronunciado sobre esta cuestión uno de los nuevos fichajes que ha hecho el PP, Borja Sémper. El flamante portavoz del comité de campaña del partido ha manifestado que la reforma del Código Penal impulsada por el Gobierno no responde a una "armonización" de las leyes en relación con los países del entorno europeo, como se defiende desde La Moncloa. "Lo que tenemos en frente es sencillamente una reforma a exigencias de aquellos que quieren tener una relación determinada" con el ejecutivo de Pedro Sánchez, ha manifestado. "Son prácticas que tenemos que cambiar, porque no es nada edificante que quien comete un delito modifique el mismo delito", ha dicho; además de afirmar que negarse a la modificación del Código Penal no era una cuestión "de derechas o de izquierdas", sino de "sensatez".
Vox suelta sus ataques contra el Gobierno
Tampoco ha gustado nada la decisión de Llarena a Vox. El partido de ultraderecha ha disparado en su cuenta de Twitter contra el Gobierno y su presidente. La cuenta oficial del partido en la red social ha asegurado que "gracias a Pedro Sánchez, los golpistas podrán pasearse por España sin casi castigo". Se lamentan, también, que según ellos si se repitiera algo similar al referéndum del 1-O "no tendrá consecuencias penales" porque la sedición quedó derogada y se ha reformado también la malversación. "Con este gobierno, lo más barato es ser un delincuente", denuncia el partido de extrema derecha.
La Moncloa considera que el 1-O sigue siendo delito
En ojos del Gobierno, en cambio, la decisión de Llarena pone de manifiesto que en el Estado el 1-O sigue siendo un delito. La portavoz del ejecutivo de PSOE y Podemos, Isabel Rodríguez, ha instado este jueves a Carles Puigdemont y al resto de exiliados a "responder ante la justicia española" sobre lo que pasó en Catalunya en octubre de 2017.