Ciudadanos fue el gran perjudicado de las elecciones madrileñas del pasado 4 de mayo. La formación que lidera Inés Arrimadas pasó de los 26 escaños que tenía a no obtener ninguno y quedar sin representación en la Asamblea de Madrid.

El partido está en un momento muy crítico y, según explica El Independiente, intentará recuperarse en una convención nacional prevista para el mes de julio que servirá para "relanzar" el proyecto con la implicación de la militancia como uno de los principios básicos de esta refundación. Este es, precisamente, uno de los grandes problemas del partido; la fuga de militantes.

Los resultados en Madrid, cuando Cs perdió más de medio millón de votos que fueron a parar al PP de Isabel Díaz Ayuso, están conduciendo a una tendencia descendente de los afiliados. Según explican fuentes del partido al citado medio, Ciudadanos tendría actualmente 2.300 militantes en Madrid, una cifra muy alejada de los 7.000 inscritos que había en abril de 2019, cuando Albert Rivera lideraba la formación.

Cuando Arrimadas se puso al frente del partido en marzo de 2020 los militantes madrileños ya habían empezado a bajar y había 5.000; en un año la cifra ha bajado hasta 2.300.

¿Lavado de cara?

Ciudadanos está satisfecho de la campaña que hicieron en Madrid pero algunas voces del partido explican a Público que no escogieron bien el lema de la campaña. "El centro no vende, y menos en un ambiente completamente polarizado".

Es por eso que algunos sectores plantean reforzar su parte "liberal" más que la "centrista"; creen que eso es lo que les permitirá diferenciarse más del PP. Así pues, destacan cuestiones como la eutanasia, el aborto, la prostitución...

Otro de los cambios podría ser un cambio de nombre del partido, ya que "la marca está quemada", según explican fuentes del partido a El Español. Este cambio es, por ahora, una inquietud más que un debate, y si se hiciera consistiría más en añadir un apellido al nombre actual. "Se mantendría la idea de la ciudadanía y quizás se podría jugar con el ingrediente del liberalismo, pero todavía no estamos en este punto. No lo descartamos, pero no está encima de la mesa", aseguran desde el partido.

Fuga de diputados y concejales

La misma semana de las elecciones, cuatro diputados de Ciudadanos en las Corts Valencianes solicitaron su baja del partido y comunicaron que abandonaban el grupo parlamentario, aunque afirmaban que seguirían trabajando y defendiendo en libertad los intereses de todos los valencianos" como diputados no adscritos.

Se trata de los diputados Jesús Salmerón, Cristina Gabarda, Sunsi Sanchis (que sustituyó a Toni Cantó después de renunciar al acta a mediados de marzo) y José Antonio Martínez, que también es portavoz adjunto del partido.

En la misma línea, cinco concejales de Ciudadanos de Vila-seca anunciaron que abandonaban el partido. Juan Antonio Ramírez, María Belén Velasco, Concepción Dolores Insa, Sandra González y Miguel Ángel Hidalgo apuntaron que a partir de entonces actuarían como concejales no adscritos a los plenarios municipales pero que lo harían de manera conjunta con una única voz.

 

Foto principal: La líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas / EFE