El exdirigente de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC y empresario David Madí ha defendido el funcionamiento de las sociedades que creó cuando abandonó la política -Nubul Consulting e IKI Cat XXI- en el juicio por fraude fiscal vinculado a la productora Triacom, que ha empezado este miércoles en el juzgado de lo penal 23 de Barcelona. Madí está acusado, jonto con otros emnpresarios, de facilitar facturas falsas a l'administrador de Triacom, Josep Oriol Carbón, el 2011. Aparte de este juicio, Triacom es una pieza separada a la del caso 3%, que investiga la Audiencia Nacional. Madí, defendido por la penalista Olga Tubau, ha asegurado que pagó "hasta el último céntimo" de los impuestos correspondientes y que Hacienda no cuestionó las facturas de sus empresas cuando las inspeccionó, ni le pidió los trabajos realixados, como hoy le exigía al fiscal. Por su parte, Carbó ha ratificado que defraudó a Hacienda para evadir impuestos.

En el interrogatorio, el fiscal Pedro Castro ha insistido en preguntar a Madí por un préstamo para abrir sus negocios, que le dio Carbó, del cual ha asegurado que es "amigo de hace años". Cuando el fiscal le ha cuestionado su profesionalidad al ser contratado por su asesoramiento pocos meses después de haber abierto las dos empresas, Madí le ha respondido: "Soy una persona conocida en el país. Soy experto en temas de contratación y en consultoría estratégica." El fiscal sostiene que las dos empresas de Madí emitieron facturas en Triacomp por 194.700 euros "por servicios no prestados" en el 2011 y por eso pide para Madí 2 años de prisión por dos delitos de falsedad documental, la misma pena que a los empresarios Jan Manuel Parra, Salvador Solé, Diego Garzón Uribe, Diego Garzón López y David Garzón. Con respecto a Oriol Carbó como admitió que defraudó a Hacienda, se le aplica una atenuante de confesión y la fiscalía le rebaja el castigo solicitado a 10 meses de prisión.

Un acusado implica Germà Gordó

En el juicio, Juan Manuel Parra, de Hispart, ha asegurado que le ordenaron que girara las facturas de trabajos que su empresa había hecho para actos de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) a Triacom, el año 2011. "Y ¿quién la dijo que lo hiciera"?, le ha preguntado una abogada. "Germà Gordó, de CDC. Me obligaron a cobrar así o no cobraba." Por estos hechos, la Audiencia Nacional tiene la pieza denominada Triacom, que se separó de la pieza central del 3%. El año 2019, Parra aportó al juzgado una grabación con Gordó del 2011, donde él le reclamaba cobrar los trabajos hechos a CDC. Hoy ha explicado que "lo hizo para demostrar que él pagaba correctamente todos los impuestos".

El juicio continúa este viernes en el juzgado de lo penal 23 de Barcelona.