Tiene gracia la portada de El Periódico de hoy porque el titular principal y el que viene debajo se complementan perfectamente: la frase de Patxi López ("Ya nos hemos peleado lo suficiente, ahora toca pactar") cae como un guante en la mano en el mundo de peleas que se reúne en Junts per Catalunya. Ayer decía algo así el titular principal de ABC: la nueva normalidad es pactar.

Da que pensar. Hasta ahora se atribuía a la cultura política catalana la voluntad de pacto como un destino manifiesto, que presidía incluso las más ásperas trifulcas. Al mismo tiempo, siempre se había puesto en solfa el trogloditismo de la política española, que sólo sabe de vencer, arrasar si es posible —no hay rivales, todo son enemigos—, y la preside un cainismo ancestral nacido de la reconquista, bla, bla, bla. Ahora parece al revés, si añadimos las disputas entre JxCat, Esquerra y la CUP a raíz de _______________ (pon lo que quieras: residencias, Mossos, Borràs, Torrent, etcétera).

Es verdad que las formas en el continente indepe son florentinas y, de momento, nadie se dice nada grueso, menos aun lo cometen. Los acontecimientos casi ni mueven el indignómetro de las redes sociales, donde el Partit Nacionalista, la iniciativa de Marta Pascal y Los de Poblet, se lleva todos los tortazos. Si no existiera este pararrayos quizás oiríamos palabras mayores. Quizás.

Así se nota en las portadas de la prensa de Barcelona de hoy. El Periódico y Ara van más fuertes que El Punt Avui... ma non troppo. Cada diario tiene su público y su sensibilidad. Esta es la prueba de que el oasis catalán vive y lucha en los diarios, que no hacen sangre de unos políticos de un partido de gobierno que se disparan entre sí y a ellos mismos, mientras malbaratan la máquina electoral más exitosa del país, excluyen a uno de los candidatos con más capital electoral del momento y a sus presos políticos. No es una guerra a hachazos —eso no se estila mucho en la tribu, sea dicho à-la-Dedéu— sino que se mata haciendo mil pequeños cortes al adversario. Quizás por eso los diarios de Barcelona tienen una actitud más circunspecta y titulan más por los hechos que por la interpretación.

Entre una cosa y otra ral vez tiene razón La Vanguardia, que no le da tanta importancia: es la noticia más pequeña de la portada. Ciertamente, este diario da mucho aire a los y las de Pascal pero, sobre todo, practica la virtud de tener poco afán de adelantarse a los acontecimientos. Dicho esto, no te pierdas la entrevista a Angela Merkel que abre su portada, para no olvidar cómo son los políticos de verdad, aunque ella no te guste. También tiene gracia si en el titular cambias "Europa" por "JxCat" o, ya que estamos, por "Los independentistas".

LV

EPC

EPA

AHORA

EP

ME

ABC

LR