El gobierno de Holanda abre una encuesta social a toda la ciudadanía para preguntar qué estrategia consideran que sería la más correcta para salir del confinamiento preservando la lucha contra el coronavirus. La desescalada ofrece a los holandeses que escojan escenarios diferentes con sus consecuencias más inmediatas y sitúa las ventajas e inconvenientes de cada una de las opciones.

El primer ministro, Mark Rutte, ha asegurado que el gobierno tomará una decisión dentro de dos semanas y tendrá en cuenta la opinión de los ciudadanos y también los informes que den los investigadores y científicos expertos en la materia. Con respecto a la encuesta se realiza de forma online y también participa la Universidad Técnica de Delft. Los resultados también servirán para conocer las motivaciones de los habitantes, más allá de las preferencias en un resultado u otro.

A grandes rasgos destacan preguntas como: "¿Se tiene que relajar el confinamiento de las residencias de personas mayores y permitir las visitas de los familiares"? En este aspecto, la encuesta detalla que por una parte eso puede mejorar el estrés psicológico de los abuelos y abuelas pero por la otra, habrá más presión social hacia los trabajadores de estas residencias que se someterán a un control más estricto.

Otra: "¿Queréis abrir bares y restaurantes manteniendo las distancias?". El informe recuerda que eso puede comportar un 15% de presión adicional al sistema sanitario si hay un retoño pero también facilitará que muchos negocios no tengan que cerrar y mejorará la economía.

La decisión final puede tener los matices que el gobierno considere pero están convencidos de que los ciudadanos "valoran involucrarse y toman más conciencia si son partícipes de sus decisiones". Durante la primera hora que ha entrado en funcionamiento, ya ha atendido más de 25.000 solicitudes y el portal web ha quedado colapsado.

Esta iniciativa, totalmente innovadora, facilitará relajar las medidas aplicadas por esta pandemia dentro de lo que consideran que tiene que ser un "confinamiento inteligente" que desde el principio ha sido menos estricto que España o Italia pero al mismo tiempo más efectivo. Así pues, no se los ha restringido poder salir a la calle para pasear o correr y tan sólo se ha pedido mantener las distancias y evitar las aglomeraciones.